_____ POV'S:
Había pasado un día desde que Tewskbury se había ido por lo tanto yo había tomado su empleo para poder estar más tiempo fuera de casa aún no tenía planeado regresar.
Estaba mirando las flores algo perdida.
—Hey _____ — hablo alguien a mis espaldas o mejor dicho el idiota de Tewskbury.
—¿Tan pronto? — pregunté algo confundida.
—¿No me extrañaste?
—No, solo te fuiste un día — contesté algo confundida.
—Vine a pedirte ayuda para ir por Enola — dijo desviando la mirada.
—¿Ayuda? ¿Qué se supone que haga?
—Solo acompáñame — contesto con una media sonrisa.
—Si te acompaño tendré que volver a casa.
Pensé bien y supongo que eso era lo mejor, volver a casa y hacerle un tipo de chantaje a mi padre para que mi abuela no me obligará a ir a ese internado.
—Bien, lo haré — afirme y él me sonrió.
...
Estábamos en un tren camino hacia el internado de mi abuela en dónde se encontraba Enola.
Al saber que ella estaba metida ahí sentí compasión por ella, ese lugar es detestable.
—¿Repasaste el plan? — me preguntó como si el mapa fuera de lo más complicado a lo cuál reí.
—Solo te dejare en el internado y me desaparezco ¿No? — pregunté y él asintió.
—Sonó muy mal eso pero resumiendo todo sí, así es, iré algún día a tú casa para escaparnos juntos.
Yo sonreí ante la idea aunque era muy probable que eso no pasará.
—¿Te gusta Enola? — pregunté muy directa.
—Eh.
Bien, con eso lo confirmo.
—Si, esa es la respuesta ¿No?
Él asintió volteando a otro lado.
...
Él camino no había sido largo así que ya habíamos llegado, empezamos a caminar hacia el internado él cual no estaba tan lejos.
—¿De aquí volverás a casa? — pregunté mirándolo.
—Probablemente, salvó a Enola e iremos a mi casa a resolver el misterio de quién me quiere matar.
Yo solo le dedique una media sonrisa para después mirar en frente.
Habíamos llegado por lo tanto ahora sí nos íbamos a despedir.
—Gracias por acompañarme y espero que no te traegan otra vez aquí — habló Tewskbury.
—Esperemos que no ¿Ya me dirás qué significado tiene la rosa rosa? — pregunté recordando la flor que me había dado.
—Supongo que es momento de decirlo, la rosa rosa es la que expresa mayor número de sentimientos: Si te regalan rosas rosas, están alabando tu simpatía y franqueza. Las rosas de este color simbolizan la ausencia de maldad, de doble intención. Manifiestan aprecio, cordialidad, actitud positiva y belleza — contesto mirándome.
—Eh, bien no entendí mucho.
—¿Recuerdas cuando te dije que me había enamorado dos veces a primera vista? — pregunto.
—Si — contesté.
—¿Sabes cuáles son esas dos personas?
—Me gustas — murmuré.
Él me miró algo sorprendido.
—Dios, esto es tan patético, adiós Tewskbury — hablé empezando a caminar.
Él jalo de mi brazo atrayendome a él dándome un corto beso en los labios.
—Hasta pronto _____ — dijo con una sonrisa.
Le sonreí y empecé a caminar hacia mi casa dejando a Tewskbury.
...
—¡Estábamos preocupados por tí! — exclamó mi padre mirándome realmente molesto.
—¿Estábamos? — preguntó mi hermano confundido a lo cual mi padre lo miro mal.
—¡A tú habitación jovencita! ¡Estás castigada toda tú vida y no puedes salir!
—Bueno, igual no quería — murmuré para después irme a mi habitación.
Me acosté mirando el techo algo frustrada.
¿Tewskbury y Enola se aman?
¿Qué es amar?
No sé porque pensaba en eso pero hacerlo solo hacía que me dieran ganas de gritar y llorar.
Tal vez Tewskbury no era para mí pero no me arrepiento de haberlo conocido.
Se qué le encanta Enola y que la prefiere a ella.
También se que le encantan las flores.
Y a mí me encanta él, irónico ¿No?
Me gusta y yo a él no y si le gustará supongo que no es lo suficiente.
—Eh prófuga, dice papá que estás salvada de ir a la escuela de la abuela — hablo mi hermano a lo cual yo le avente una almohada por lo feo que estaba.
Seguía pensando en Tewskbury, todos mis pensamientos estaban en él.
...
Ya era de noche y me empecé a acomodar en la cama, extrañaba dormir y saber que al día siguiente la primera vista que vería sería el rostro de Tewskbury.
Pero él ya no estaba.