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Younghyun lloraba con frecuencia porque se odiaba. Siempre recibía críticas debido a su mal carácter.
Su madre había visto por él y lo crió lo mejor que pudo, él la adoraba porque fue la única que vio por su bienestar, que nunca le faltara un bocado de comida. Pero su padre jamás fue bueno. De hecho, fue un mal esposo, mal padre y mal hijo.
Y sacó su carácter.
Younghyun tendía a gritar cuando estaba enojado y se odiaba debido a eso, porque le recordaba a su madre con su carácter sacado de su padre, lo mucho que lo odiaba.
Un día llegó cansado, con quince años y recién llegado del colegio, con mal humor, pero sin querer decir nada. Odiaba comer solo, así que su madre se quedó unos minutos hasta que habló al notar su estado:
-Cuando estás de mal humor, eres igual de despreciable que tu padre.
Sabía que era cierto, pero él no recuerda haber gritado aquel día. De hecho, sólo recuerda haber llorado y haberse quedado solo mientras comía. Fue algo nunca se le olvidó y aunque quería una disculpa, sabía que no la merecía.
Ella siempre decía que era como su padre y esa era la justificación que sacaba si le gritaba cosas ofensivas. Que era igual a su padre. Y Younghyun sacó la conclusión de tener que quedarse solo para siempre como su padre.
Eres problemático. Esa era una de las frases que más escuchó en su vida.
Un día Jake, su perro había amanecido enfermo, así que llamó a su madre con miedo, porque él realmente quería a Jake y no quería que le pasara nada. Su madre llamó a veterinario y Jake empezó a mejorar con las horas, pero aquella noche la pareja de su madre llegó a cenar y ella empezó a contarle sobre el día.
-Younghyun llamó alterado sobre el perro enfermo, dramático como siempre. Así es él.
Eso fue lo que ella dijo. Younghyun alimentó el monstruo de la inseguridad con cada comentario que ella decía sobre él. Le daba vergüenza ser así. Simplemente le daba vergüenza ser él.
Tenía un carácter horrible porque levantaba la voz al enojarse pero ésta se quebraba por las ganas de llorar.
Una noche, en la cena, Younghyun salió de su habitación con los ojos hinchados por llorar con un libro. Al inicio su madre se mostró preocupada.
