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15.

CAP. 15. '¿DESAPARICIÓN?'

Cuando me vieron más de cerca, todo el mundo pensó que yo la había matado, hasta que la policía vino a registrar el cuerpo y se dio cuenta de que realmente había sido algo voluntario.

No recuerdo nada más de esa noche.

Recuerdo ese 9 de noviembre del 2010. Tenia 11 años cuando ocurrió  todo esto. 

Intentaba darme una ducha rápida para marcharme de los baños de educación física antes de que llegaran ellos a molestarme como era de costumbre. Ese día había algo que simplemente no se sentía bien, como una especie de vibra extraña que hiciera que me sintiera más aterrado de lo normal. Era un niño inocente y con miedo que temía a que le volvieran a agredir como solían hacer usualmente sus abusones. 

Oí unos pasos y sabía que era demasiado tarde. Recuerdo todo borroso de esta parte, intentaba permanecer quieto de lo aterrorizado que estaba y al mismo tiempo miraba a la puerta esperando a que solo fuera otro niño más que se había olvidado de algo dentro. Creo que incluso me hice un poco de pis encima.

Cuando les vi a ellos, supe que algo malo ocurriría. Me encontraba completamente desnudo e indefenso en una sala vacía y sin nada de lo que pudiera defenderme. Ellos se acercaron a mi sin miedo como solían hacer, cuando el rubio saco una cuchilla de su chaqueta vaquera.

Temí a que me cortaran el dedo o incluso el pene, por ejemplo. Pero en vez de eso, me agarraron en grupo y el jefe del grupo comenzó a clavarme la cuchilla, atravesando mi piel. No pude evitar gritar mientras lo hacían, el dolor era insoportable. 

Lo hacían en mis brazos y muñecas, vertical y horizontal, sin importarles realmente cuanta sangre pudiera perder. El suelo estaba rojo, el agua seguía cayendo sobre mi y se mezclaba con la cantidad de sangre que estaba perdiendo. El dolor era tan inmenso que durante el trazo de la segunda letra simplemente deje de sentirlo. 

La cicatriz nunca se borro, igual que el desagradable recuerdo. No me arrepiento de haber acabado aquí por el asesinato que cometí años posteriores. 

No siento más culpa. Es un sentimiento que desconozco. 

Cuando abrí los ojos Rod estaba allí. Dibujaba algo en un cuaderno, tenia un bote de pinturas sobre la mesilla de la enfermería. Estaba encogido en la silla, con las piernas encima suya. Parecía feliz y entretenido. 

'Hola' saludé a duras penas. Rod levantó la mirada y sonrió. 

'¿Como estas pequeño Timi?' preguntó con un tono de voz tranquilo y suave. Como si nada hubiera ocurrido. Fruncí el ceño y me acomodé en mi propio sitio. 'Creo que mejor' 

Dejo el cuaderno sobre la mesilla, pude ver de reojo el dibujo aunque no pudiera mover con facilidad el cuello. Cuando me lo intente tocar me di cuenta de que tenia un collarín, de esos que sirven para ayudarte a mantener el cuello quieto. '¿Como te hiciste eso?' preguntó. 

No sabía si responderle con sinceridad o simplemente ocultar lo que había pasado. No sabia donde estaba Hunter y al mismo tiempo no temía de su existencia mientras Rod permaneciera a mi lado. 

'Ya te contaré' contesté, sin dar muchos detalles del asunto. 

'¿Quieres ver lo que te hiciste?' preguntó como si intentara meterme curiosidad sobre el tema. Se balanceo sobre su silla hacia delante con interés en mi respuesta. Pestañee dos veces y asentí con dificultad. 

Rod agarro algo de uno de los cajones y lo cerro de inmediato. Se sentó a mi lado, intentando no tocar mi cuerpo para no incomodarme. 'Mira' dijo poniéndome en frente unas fotos.