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9.

CAP. 9. 'PAPÁ DROGADICTO'
(este capítulo ya fue subido pero por alguna razón se hizo privado.)

Por alguna razón aún no se me había establecido ningún compañero de habitación. Probablemente alguien de los nuevos acabaría siéndolo.

Pero hasta entonces, Alicia y yo aprovechábamos la habitación para tener sexo a escondidas de los demás. Comenzaba a tener más confianza en ella y empezamos a hablar con más frecuencia.

Rodrigo aún no sabía nada de esto.

No era mi problema.

Una vez terminábamos, salíamos afuera a dar un paseo. Era una forma de mantenernos distraídos de comer.

Por una vez, no me importaba mi apariencia física pero tampoco podía decir que Alicia me estaba salvando. No me gustaba. Solo nos servimos de ayuda mutua o al menos, eso creo.

Pero esa tarde, Alicia se fue a visitar a sus padres a las afueras de la ciudad. Tenía un día de salida por buen comportamiento, agarró sus cosas esa misma mañana y salió temprano.

No me importaba estar solo. Decidí salir a dar un paseo yo solo por el sitio.

'¡Matias!' se interpuso delante mío la pequeña Sofía mientras ""comía""".

Era raro verla levantada durante el tiempo de la comida, principalmente porque estaba prohibido. Mire hacia los alrededores, no había ningún guardia. A veces el descuido de los centros puede llegar a ser increíble.

'¿Que?' pregunté extrañado ante su presencia. Desde lo que ocurrió, no me había cruzado con ella ni una sola vez.

'Tenes que ayudar...' parecía que la faltaba la respiración. Solté el tenedor, es extraño en mi preocuparme por alguien desde lo que ocurrió pero parecía realmente necesitar ayuda.

'Acompañame' me invitó a levantarme. Seguí mirando a mis alrededores si algún guardia se encontraba cerca, por suerte, ninguno.

Fuimos andando sigilosamente por los pasillos. No sabía exactamente a donde me llevaba, ni cuál era su razón. Por un momento pensé que algo preocupante le podía haber pasado a Alicia, luego pensé que quizás exageraba.

Detrás de el pasillo de las habitaciones, al final, se encontraba la habitación de los baños. Eran dos, uno para mujeres y otro para hombres y constaban de duchas conjuntas donde nos mandaban cada mañana.

Sofía se colocó delante mío, volvió a vigilar y finalmente abrió el portón. Sono un poco al hacerlo e inmediatamente entró en la habitación. No entendía nada, simplemente se quedó parada y se tapó la boca con la mano.

Entonces entendí todo. Rodrigo estaba sentado en el suelo de las duchas del medio, completamente desnudo, tiritando y mirando a un punto blanco del suelo.

Volví a mirar a Sofía, quién estaba paralizada ante la situación de su amigo y solo podía echar lágrimas silenciosamente y taparse con los brazos el rostro.

No sabía que hacer, entendía que estaba bajo la sustancia de alguna droga por su mal aspecto y su mirada desviada pero tampoco sabía cómo proceder. Nunca había estado ante una situación como aquella.

Me acerqué, me arrodille en el suelo de la ducha intentando no mojarme y le ofrecí mi mano. El, no se movió.

Ni siquiera la observó. Siguió encogido en el mismo sitio de antes.

'¡Rodrigo!' llame su nombre sin intentar hacer demasiado ruido. '¡Rodrigo, vamos!' volví a llamarle. No se inmutó, estaba completamente paralizado.