안되는데 (I can't) (Taehyung y Tú) (+18)

Pt. 16 - Ambos

***Lemon soft (parte 1) 😊 leer bajo su propia responsabilidad... igual es muy soft, jeje***

Taehyung deja caer todo el peso de su cuerpo en el sofá, acompañado de un suspiro que le deja inmaculado, largo, profundo y familiar, sólo a él, que tiene esa distintiva voz, podría ser el dueño de tal suspiro, se volvió familiar por el tiempo que pasaron estudiando, y por fin la época de exámenes ha terminado. Su mochila se desploma al piso y el contenido se esparce por la alfombra. Dejas las llaves junto con el abrigo y la sombrilla en la enclenque mesa junto a la puerta, reprimiendo una sonrisa.

-Por fin ha terminado, ¡Somos libres! -exclama Taehyung, pero cansado, alzando los brazos en el aire y recostando la cabeza en el espaldar, lo más que la pose arqueada de su cuerpo puede permitirle.

Haces una mueca, ladeando la cabeza.

-Estoy casi segura de que reprobamos el examen de Literatura Universal -respondes.

Él se encoge de hombros.

-Pero ya lo hicimos, eso es lo que importa.

Namjoon cierra la puerta tras de sí, aplacando el concierto que da la tormenta. Su cabello gotea y tiene la ropa tan empapada que ha cambiado de color.

-Te recomiendo revisar tus prioridades -le dice a un Taehyung que canta (literalmente) de la alegría. - ¡¿Por qué ustedes están secos?! ¡Sólo me devolví un momento a la camioneta para asegurarme de que los vidrios estuviesen arriba!

Ríes, quitándote los zapatos y caminando a la cocina.

- ¿Era necesario?

Su mirada lo dice todo, es mi bebé, mi tesoro, severo. Camina hacia la sala, y te apresuras a detenerlo, lanzándole una toalla pequeña a la cabeza, gritándole que no haga un desastre. Se voltea hacia atrás, ha dejado un rastro de agua lodosa hasta el sofá. Ruedas los ojos.

Taehyung se ríe, y el rostro de Namjoon se ruboriza.

-Creo que debería ir a casa, a por ropa limpia.

Te encoges de hombros, sentándote junto a Taehyung, que revisa Wikipedia en su celular, pones el tazón de frituras en sus piernas y en las tuyas depositas la caja con caramelos.

-Debí saber que 1984 era una distopía y no una novela de Fantasía Épica... -se lamenta, viendo la pantalla y comiendo.

Namjoon se seca el cabello, y frunce el ceño, parece que su amplio conocimiento literario ha sido herido.

-Pero por supuesto que sí, y debiste pedirme ayuda con Literatura.

Asientes, arrepentida de no haberlo pensado antes.

La tormenta continúa fuera de la comodidad de tu apartamento, y no consideras prudente dejar que Namjoon salga.

-Te puedo prestar ropa -dices, encendiendo la TV y buscando, sin mucho interés, en Netflix. Taehyung traga saliva a tu lado, pero decides no voltear hacia él. Namjoon duda con la mirada -¿Qué? Tengo camisetas y joggers de hombre, grandes, mayor comodidad.

-¡Legion! -exclama Taehyung, señalando la pantalla. Sorprendida, te vuelves hacia él. Tiene una sonrisa que enseña los dientes, juguetón -es una serie de superhéroes.

Le das reproducir.

-Mejor voy por Jin y vuelvo con ropa seca -dice Namjoon, revisando sus mensajes -, parece que está atrapado en el Café.

- ¿Seguro?

Te responde con una sonrisa que enfatiza sus hoyuelos.

-No tardo. Los demás deben estar en camino, pero por el clima supongo que les tomará un rato llegar -se dirige hacia la puerta, pisando sus pasos para no empeorar el desastre, pero da trompicones, a punto de perder el equilibrio y caerse -¿puedo llevarme tu paraguas?

Asientes.

El primer episodio de Legion comienza -porque Taehyung te ha quitado el control remoto para darle play-. Cuando Namjoon abre la puerta, una corriente de brisa helada se cuela en el apartamento. Asomándose por el marco de la puerta, Namjoon les llama.

-Diviértanse -musita, con una sonrisa pícara y cómplice -, pero no demasiado -alza las cejas en señal de advertencia, y se retira, cerrando la puerta y cerrándole el paso al frío, dejándoles con las bocas abiertas.

Taehyung permanece pensativo, intercambian una sonrisa tímida, cómplices, y fingen prestar atención a los últimos minutos del capítulo. El tiempo pasa, recorriendo la historia de Legion, pero ninguno se entera de nada. Ambos están perdidos en sus pensamientos, en silencio, y preguntándose qué sucede en la cabeza del otro, ansiosos, cuidando los movimientos que hacen sobre el sofá.

¿Cuándo darás el paso, Kim Taehyung?, no puedo hacerlo todo yo...

Te acurrucas, recogiéndote las piernas con los brazos y subiéndolas al sofá, y tu rodilla roza el borde del tazón de frituras, casi vacío. En el capítulo que corre suena She's a rainbow de The Rolling Stones, y te giras para decirle que amas esa canción, pero le pillas mirándote de reojo. La distancia entre ambos se empieza a reducir, y fijas la mirada en el lunar bajo su ojo, él traga saliva, y eso te hace sonreír.

Y, por fin, desde su encuentro en la fiesta, recuerdo renuente de tu cerebro, Taehyung se decide a comerte la boca, deja el tazón sobre la mesa de centro y la caja casi entera de caramelos en el piso, y se devuelve sobre su posición casi sobre ti.

Tus piernas estorban, y te sientas sobre las pantorrillas. Tus manos buscan los hombros de Taehyung y las de él te sujetan el cuello casi superficialmente. La canción termina y el chasquido de sus labios desplazando la saliva en la boca del otro te llena los oídos, eso causa que te recorra el calor por el cuerpo como el agua hirviendo en una ducha.

Sus besos saben a caramelo, sonríes entre besos e, inconscientemente, le levantas la camiseta con la punta de los dedos, porque quieres desbloquear el recuerdo de su piel contra la tuya. Sus divagaciones quedan atrás, y parecen estar de acuerdo en deshacerse de la ropa del otro.

El único momento en el que se dignan a detener el beso es para quitarle la camisa al otro, y ambos se toman un momento para apreciar la desnudez, el lazo de amistad distante roto, la intimidad, como haber desbloqueado el nivel final en un videojuego, y ganado la partida, haber conseguido el premio. Te percatas de la respiración ligeramente jadeante de Taehyung, conforme te sientas sobre sus piernas, frente a él, encerrándolo entre tus piernas.

A la mierda quién da el primer paso. Taehyung pone las manos sobre tus caderas y te atrae hacia sí para volver a besarte. 

Ah, volví a perderme, lo siento... 

La buena noticia es que se viene lo hot, jeje