Capítulo 10⚔️: El plan

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Definitivamente esta no era una buena idea

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Definitivamente esta no era una buena idea. No dejaba de repetirme una y otra vez que debíamos cambiar de dirección. Supuestamente la reina tenía una especie de diario donde escribía todos los días. Al menos fue lo que Harry dedujo, ya que la veía siempre escribir en el mismo cuaderno cuando la visitaba a su dormitorio.

¡Harry y sus grandes ideas!

No solo le habíamos robado al rey, ahora también a la reina. Lo peor de todo era que me tocaba ser la "distracción". Cuando Harry se refirió a hablar con su madre entendí que él hablaría con ella, no yo.

—Pésima idea. —El comentario de Nora estaba de más, yo pensaba exactamente lo mismo que ella.

Caminábamos hasta donde estaba Silvia. Nora me dio un leve codazo para enseñarme a la Reina y su grupo de seguidoras. Estaban sentadas en una especie de parque, tomaban al parecer té.

¿Qué diría?

<<Hola Silvia, aquí estoy para que me saques los ojos si es necesario y que así tu hijo te robe el diario>>

—Bien, este es el plan —dije mientras me acercaba a Nora, ella solamente se quedó atenta—. ¡No hay plan! —chillé.
Arrugó su nariz como de costumbre y negó con la cabeza como si ya esperara esa respuesta.

Harry nos dijo que debíamos entretenerla al menos por una hora.

—¿Qué vas a hacer Verónica? —Nora observó a Silvia con cautela, la verdad es que solo se me ocurría una cosa...

—Tú solo finge estar conmocionada con lo de anoche.

—Estoy conmocionada...—dijo con malas ganas.

—No entiendes, debemos darle un espectáculo de drama.—Nora sonrió.

—Entendido. —Me guiñó el ojo y le hice señas para que me siguiera.

<<Necesito entrar en el cuarto y tomar su diario, solo debes entretenerla hasta el mediodía para poder buscar bien>>

Harry era un niño, pero tenía grandes ideas, y cuando digo grande era que todas implicaban una guillotina de por medio y algún que otro cuello en juego. Según él funcionaría y ahí encontraríamos con quien se vieron en estos días. Solo hacía falta un nombre, solamente una persona para ayudarnos a investigar más sobre los Faes.
El dueño del libro.

Las damas conversaban discretamente con la reina. Estaban sentadas en grandes almohadones de colores, repletos de piedras preciosas y perlas. A su alrededor no solo había varias damas de compañía, también algunos bufones haciendo chistes. Lo que más me agradó a la vista fue una enorme mesa repleta de coloridos postres y frutas.

Nuestra presencia captó toda la atención del lugar e incluso se detuvo la charla. Estas mujeres amaban hablar de los demás y podía apostar que yo era uno de sus principales temas de conversación de estos días.

La corona de la esclava ®Donde viven las historias. Descúbrelo ahora