Jenia me cuenta lo muy estúpido que se coloca Tomás, cuando ella quiere salir mientras la termino de maquillar. A veces el chico sobre pasa sus celos, pero lo entiendo, él está enamorado de Jenia, pero como los hombres a veces no piensan con la cabeza lo jodió y Jenia no es alguien que da segundas oportunidades.
— Estoy cansada de sus malditos celos, es que como no entiende que no volveré con él. — Exclama moviendo sus manos hacia arriba.
—Es que está enamorado, es estúpido lo sé, pero no puedes hacer que sus emociones cambien. — Ella niega con su cabeza.
—No cariño eso no es amor, es obsesión. Cuando amas a alguien no importa lo borracho que estés no le eres infiel, porque solo tienes ojos para esa persona, Tomás me engaño eso significa que no me ama como yo lo amaba a él. — Asiento, la verdad es que tiene razón, si amas alguien ¿por que serle infiel?.
—Es un Imbécil — contesto.
—Si lo es.
Jenia se mira en el espejo redondo con luces que tengo y se le forma una sonrisa.
—Me veo de puta madre, gracias. — Me abraza, la rodeo con mis brazos y la aprieto, ella comienza a reclamar.
—Odio los abrazos de osos. — Se queja separándose de mí, le saco la lengua.
Salimos de mi casa camino a un Res-tobar para celebrar el cumpleaños de Jenia, ella hace sonar la alarma de su auto y nos subimos, antes de ir al res-tobar pasamos a buscar a Selena, ella es amiga de Jenia. Yo no he compartido mucho con ella, pero es bastante agradable.
Jenia hace sonar la bocina del auto unas tres veces, a la última sale una Selena con un vestido blanco que hace resaltar el negro de su pelo, se sube al auto y nos saluda con un beso en la mejilla.—Necesito terminar hasta el culo hoy. — Comenta Selena, Jenia asiente en acuerdo.
—Yo también — contesto, Selena levanta la palma de su mano y hace que la choque con ella.
En el camino Jenia y Selena van hablando sobre lo mal que salió su cita doble, al parecer cada una fue con un chico y al encontrarse en el lugar se dieron cuenta, que las dos habían salido con los dos chicos en citas anteriores.