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Nivel 17
❝Pellizcar, Arañar❞

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El ruso y el chino se encontraban en el patio de su casa, recostados en el cesped. Era una noche muy hermosa, ligeramente calurosa, algunas luciérnagas volaban alrededor de ellos.

China estaba arriba de su novio, dandole besitos tiernos en los labios, en su rostro. Rusia estaba muy tranquilo realmente, acariciando las caderas del más bajo, con mucho cariño, disfrutando de cada uno de los besos que el chino le repartía.

──Russha~ Te amo tanto~──soltó una risa, jalando de las mejillas del tricolor con dulzura. Rusia reía ante esos toques, no le molestaban en lo absoluto, pero empezaba a sentir que lo hacía cada vez más fuerte.──Ch-China... M-me apretas mucho

──Oh, perdón, Russha.──se disculpó dándole unas caricias a su mejilla. Rusia suspiró aliviado, pensaba que su novio iba a enfadarse o algo por el estilo, últimamente suele enojarse mucho por cosas simples.

Unos momentos más tarde, sus mejillas volvieron a ser jaladas, pero está vez con demasiada fuerza repentina, Rusia se quejó al instante de eso.──Ch-China... otra vez me apretas...──pero esta vez, China no se detenían. Seguía jalando con fuerza, sentía que su mejilla dolía mucho incluso en los milisegundos que lo soltaba.

──Russha, eres muy sensible. No te quejes tanto, si no te estoy haciendo nada.──China lo miró a los ojos, jalando aún más su mejilla. Soltó una risa.──Je, te vez gracioso.

Rusia soltó una risa nerviosa, sudando ligeramente.

𝗩𝗜𝗢𝗟𝗘𝗡𝗧𝗢𝗠𝗘𝗧𝗥𝗢 RUSCHINADonde viven las historias. Descúbrelo ahora