Segundo libro de la Saga Inmortal
─ "Sus labios rosados abultados, sus ojos oscuros incitándome a cometer el peor pecado solo para obtenerlo, para poder llamarlo mío y su suave piel bajo las yemas de mis dedos, junto ese aroma tan atrayente que me e...
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Era difícil y casi temeroso, Plan aun debatía si debía de acercarse a la hermosa recepcionista que atendía las llamadas que entraban y que resonaban por toda la estancia o simplemente darse media vuelta y salir de ese lujoso edificio.
Pero, ¿Que iba a decir?
Le daba verguenza preguntar por Mean, sin embargo, algo dentro de él ansiaba verlo, así que antes de que se diera cuenta, ya estaba frente al escritorio de esa mujer, esta colgó el teléfono y levantó la vista para verlo con una amable sonrisa.
─ ¿Se le ofrece algo?
─ Eh yo, quería ver si estaba el señor Phiravich ─su voz tembló un poco y no pudo sostenerle la mirada a la secretaria, mas esta no notó el comportamiento nervioso del contrario
─ ¿Tienes una cita con él?
─ ¡¿Que?! ¡No! ¡Él y yo no estamos saliendo! ¡¿Por que iría a una cita con él?! ¡No tiene sentido!
La chica comenzó a reirse fuertemente, encantada con la actitud tan nerviosa de Rathavit, jamás pensó en algo como eso, pues el preguntar por una cita con su jefe es algo normal, pero este chico pareció mal interpretar esa palabra.
─ No, joven yo... ─Sara logró recobrar la compostura ─ Yo me refería a que si tiene agendado una cita de trabajo o reunión con el señor Phiravich
La cara de Plan se volvió roja y tuvo fuertes deseos de lanzarse desde la ventana de este ultimo piso.
─ B-bueno, n-no exactamente, pero me urge verlo, ¿Cree que pueda decirle que estoy yo aquí?
─ Lo siento, el señor se encuentra algo ocupado dentro, no estoy muy segura de poder hacer eso, pero si quiere puedo agendar su visita para otro día...
─ ¡No! ─la chica saltó en su sitio ante el grito angustiado que Plan pegó ─ Perdón, yo, solo quiero verlo unos segundos, ¿Puede llamarlo? Si él esta muy ocupado le juro que me retiro
Sara pareció pensarlo un poco, para luego suspirar y tomar el teléfono, marcando a la oficina de su jefe, el cual contestó a los pocos segundos.
─ ¿Si?
─ Jefe, alguien aquí dice querer verlo, al parecer le urge
─ ¿Ahora? ¿Tiene una cita?
─ No señor ─Plan le susurró su nombre a la recepcionista y ella dudosa le informó ─ Dice que se llama Plan Rathavit
─ Déjalo pasar de inmediato ─sin mas la llamada se cortó y Sara vio el aparato como si fuera traído del espacio exterior
¿Así nomas? ¿Tan fácil? ¿Quien era este chico?
─ ¿Y? ¿Que dijo?
─ Que puede pasar a la oficina ─la chica se levantó acomodando su falda larga entubada ─ Por aquí por favor
