Soy la Niñera de Mi Jefe

14 | Puedo Hacerte Feliz

MADDIE'S POV

"Entonces, el dragón sacó grandes llamas de fuego de su boca, quemando el castillo de la princesa," le digo dramáticamente a Jack mientras muevo su peluche en forma de dragón arriba de él, extendiendo sus alas para mostrar que está volando.

Jack lleva sus manos hacia sus mejillas, denotando preocupación al escuchar mis palabras. No sé si es coincidencia pero pareciera como si estuviese comprendiendo la historia que le estoy inventando y eso me da satisfacción. Creo que no soy tan mala niñera después de todo.

Tomo su peluche de la Princesa Daisy, de Mario Bros, y la llevo hacia los pies del dragón, "¡Oh no! ¡Me han atrapado!" La princesa exclama en terror, "¿Dónde estará mi príncipe para salvarme?"

Mi cuerpo brinca ligeramente cuando veo la puerta de la habitación moverse.

Dirijo mi atención hacia ella para revisar si Sarah necesita que le ayude con algo, pero frunzo el ceño cuando encuentro medio rostro tratando de observar hacia adentro.

¿Qué está haciendo aquí?

"¿Drew?" Le pregunto confundida, verificando que si es él quien está en la puerta.

En realidad sé que es él ya que su físico es inconfundible, pero no entiendo que está haciendo afuera.

Después de unos segundos, abre la puerta del cuarto, revelando la totalidad de su cuerpo. ¿Nos habrá estado observando desde hace tiempo? Estaba tan concentrada contándole y actuándole la historia a Jack que no registré a nada ni nadie más en mi mente.

Drew fuerza una sonrisa, su mano aún sobre la perilla de la puerta y su cuerpo un poco tenso.

"Hola," es lo único que me dice después de una semana de no haberme dirigido la palabra.

Me percato de su incomodidad y por ende deduzco que su intención no era entrar a la habitación para hablar. Bueno, al menos eso parece.

Lo analizo por un segundo, esperando a que me diga algo, "Hola," le digo de vuelta para llenar este silencio incómodo.

No he olvidado las palabras hirientes que me dijo aquella noche en Sweet Dreams pero honestamente ya no siento la misma molestia de antes. Es como si hubiese liberado todos aquellos malos sentimientos que llenaban mi ser porque sabía que no me estaba haciendo bien pensar en ellos una y otra vez.

Lo superé y continué caminando hacia adelante, o como decía mi padre, le di vuelta a la página y continué con mi vida.

Hubiera sido tonto de mi parte sufrir por lo que alguien me dijo, y más cuando ese alguien fue un chico lleno de ira y alcohol en su cuerpo. Además, no hay que quedarnos estancados en el pasado, ya que nos volveríamos locos.

"¿Necesitas algo?" Le pregunto amablemente. Jack toma el dragón de mis manos y comienza a jugar con él, ignorando el hecho de que su hermano está aquí.

Drew aclara su garganta y da un par de pasos hacia adentro de la habitación, "No," me responde, "Solo pasaba por aquí y quería pasar a ver cómo estaban," me dice en un tono tranquilo y hasta un poco nervioso.

En todo el tiempo que he estado en Star Hill Palace nunca había visto nervioso a Drew y tengo que admitir que esto me agrada. Me gusta verlo vulnerable y sin el rostro arrogante y presumido que siempre lleva a todos lados. No sé, encontrarlo así lo hace ver un poco más humano y con los pies sobre la tierra.

Muevo mi cabello hacia atrás de mi oreja, "Estamos bien," le digo, presionando mis labios para formar una pequeña sonrisa, "Jack y yo estábamos jugando con sus peluches," le informo dulcemente, mostrando otra sonrisa, pero esta vez una más genuina que la anterior.