Evan...Styles. (Segunda parte de "Esposo posesivo")

Capítulo 14.

Haría lo mismo. Sí. Eso haría.

Mamá ya me había llevado a hacerme exámenes hace unos años, ella sospechaba de su propio hijo, ella sospechaba de mí.
Los resultados de los análisis fueron positivos, yo mostraba ondas cerebrales inusuales, yo tenía esquizofrenia, igual que papá, pero, cuando encontré los escritos...todo cambió, tener esquizofrenia no es una enfermedad, es un don, y yo tenía la fortuna en mi cuerpo, en mi mente.

Es difícil de explicar lo que siento, es como...como si yo estuviera en medio de una laguna, solo, sin nadie más, pero...las voces...esas voces que resuenan en toda mi cabeza... ellas provienen de la laguna de la que no puedo salir, y...me gusta estar ahí, siempre sabemos qué hacer, qué decir...siempre saben lo que quiero y puedo ser yo mismo a pesar de escucharlas. Es una sensación magnífica, puedo percibir mejor cualquier cosa, y, cuando pienso, pienso en grande, las voces me ayudan a tomar las mejores decisiones, la mejor voz es la de papá, él siempre me calma, y desde que puedo verlo es aún mejor.

Yo sabía que los esquizofrénicos ven cosas que no son reales, pero papá es real, papá siempre me cuida, papá está orgulloso de lo que estoy haciendo por él, lo que él no pudo terminar...lo terminaré yo, él sólo quería una familia, y la tendrá, la tendremos.

Me acerqué a ella lentamente, estaba dormida. Se veía muy frágil... más que nunca.

Acaricié su suave y rubio cabello para después tararearle una canción, quería que despertara, tenía que contarle lo que había pasado hoy, necesitaba hacerlo, necesitaba a mi mamá.

-Evan... -murmuró abriendo los ojos con dificultad.

Le sonreí y dejé de acariciar su cabello.

-Hola mamá -le besé la frente. -Hace un rato tuve miedo, pensé que no podría regresar a verte más -murmuré contra su frente.

-¿Por qué? -preguntó con voz nerviosa. -¿Todo está bien?, ¿cómo está Ally?

-Ally está bien, la dejé dormida en mi habitación, ella está muy bien -sus ojos me miraron con tristeza. -Lo digo en serio mamá, ella está bien, no tienes porqué sentirte triste.

La abracé y ella no se apartó, dejó que la abrazara, pero no correspondió.

-¿Cuándo me dejarás verla?

-Cuando nos vayamos de aquí -afirmé mientras limpiaba un poco el pequeño espacio.

-¿De qué hablas?

-Nos iremos de aquí después de que Liam acepte ser culpable -ella me miró aún confundida.

-No estoy entendiendo...Liam no me ha hecho nada, él es inocente, ¿cómo podrían culparlo?

Apreté los puños y mi giré para mirarla. Tenía que ser una broma, ¿cómo podría decir tal cosa?, ella está aquí gracias a él, papá está muerto gracias a él, nos fuimos de nuestro verdadero hogar por culpa de él, ¿qué le hacía pensar que él no era el culpable?

Las voces comenzaron a inundar mi mente.

-Por él estás aquí -hablé entre dientes. -No lo vuelvas a defender nunca más, él tiene la culpa de todo.

-Evan... -empezó, pero la interrumpí.

Me acerqué a ella, tanto que retrocedió hasta pegar su cuerpo a los paneles de espuma.

-Si no hubiera sido por él, papá estaría vivo, tú nos has metido, él no murió en un accidente -solté mis palabras sin pensarlas mucho, yo sabía que ella había mentido para mantener el secreto de papá.