"Trabajos varios" [MadaIzu \ItaSasu]

capitulo 12

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Abrazado al cuerpo del mayor despertó Izuna, sintiéndose bastante satisfecho. Madara continuaba dormido, sentía su respiración tranquila en señal de estar profundamente descansando. Reincorporó su cuerpo sentándose en la cama, dirigió su mirada al rostro del mayor sonriendo como respuesta.

—Wow... si.. se que ya lo dije pero mi sobrino es adivino —paso su mano por su rostro echando algunos mechones de cabello atrás. — Y yo que pensaba que sería aburrido... vaya...

Salió de la cama con cuidado de no despertar a Madara, se inclinó con suavidad buscando los labios del mencionado para depositar un beso. Rebuscó en su maleta encontrando una camisa para vestir, su cuerpo estaba entre sudado y lleno de rastros de semen, no quería ducharse. Se vistió con la prenda la cual solo cubría hasta poco más abajo del inicio de sus muslos dejando a la vista su trasero.

Confirmó la hora en su teléfono viendo que gracias a sus jueguecitos habían perdido el tren de ese día. Suspiró, esa situación no era tan mala... al menos tendría tiempo para hablar sobre algunas cosas con Madara y cuando ya estuvieran en su casa... en la de sus padres las cosas no serían tan incómodas.

Pidió algo al servicio de habitación, estaba muy hambriento y cuando Madara despertará también lo estaría. Aprovechó para sacar una soda del minibar de la habitación mientras ponía en orden la pieza y sus maletas como primcipal desorden.

Unos minutos después ya tenía casi todo en orden, solo quedaba la cama y su propio cuerpo el cual debía bañar cuanto antes. Sostenía una prenda de ropa en sus manos la cual cayó al suelo en respuesta al exttemecimiento que recibió su cuerpo.

—Buen día o ¿debería decir noche? —comentó Madara con tono travieso abrazando por la espalda a Izuna.

—Ya despiertas —sonrió suavemente —¿Estas hambriento? —comentó escuchando su propio estómago rugir —Ta pedí algo.

—Hm—resoplo Madara —Lo estoy, pero si te digo que ahora más que comida se me antoja otra cosa —jugueteó divertido colando las manos bajo la camisa que portaba el menor acariciando su abdomen.

—¿En serio? Lo lamento —cortó el contacto —Yo si lo estoy, algunos necesitamos comer comida para tener fuerzas.

—Esta bien —sonrió travieso.

Ambos salieron de la cama, el mayor de colocó una bata de baño para cubrir su cuerpo. Izuna hizo un gesto para hablar pero la puerta sonó... , por fin el servicio ala habitación.

—Yo voy —se le adelantó Madara señalando la parte baja de Izuna poco cubierta con la camisa —No quiero que nadie mas tenga el placer de verte.

Avergonzado asintió, optó por usar  algo de ropa interior y dirigirse luego a la cocina.

—Oye necesitamos hablar.

—Esta bien, di lo que quieras —dijo Madara —¿Es pizza? —señaló a la comida.

—Si, ¿no te gusta? —alzó una ceja curioso.

—No es eso... es solo que no acostumbro a comerla. Ya sabes no es algo que pidas mucho en reuniones y fiestas de estirados.

Izuna tomó una rebanada de la pizza y una soda en la otra mano, se sentó en el sillón en una pose bastante cómoda mirando desafiante a Madara.

—Ya imagino —dio un mordisco travieso a la pizza, parte del queso quedó en la comisura de su boca, lamio tratando de limpiarlo —Comer pizza es difícil... suele suceder esto —imitó su anteror acción acariciando está vez sus labios de forma sensual —¿Te enseño?