🦂 ZULIERRO 🦂

25. Como un puzzle

Nota de la autora :3 (Escuchen la puta canción que no la puse nadamas al pedo, ademas esta cool ahí se basa el capítulo)

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ZULEMA>>

Una risa de incredulidad se escapa de mi.
Muerdo mi labio inferior tan fuerte que siento el sabor metálico de la sangre sobre mi lengua. 
No entiendo porqué me pasa esto siempre... con el odio que me invade al mirarlo sonriendo y asintiendo todavía mientras camina más lejos, aún con el móvil en en las manos. 

Simplemente podría reventarle la cabeza e irme.
Un par de balas gastadas. Un corazón roto y el alma traicionada.

Olvidarme de todo.

Olvidar que lo quería.

Olvidar que le creí...

Pero mis manos tiemblan, mis pies apenas se podían sostener. No quería hacerlo...

Quiero explicaciones, sanar recuerdos.
Saber lo que es cierto.
¿Cuanto dijo que me amaba?

...

De un momento a otro sentí la música aumentar su volumen.
Más personas llegan a esa sala, doy un último vistazo a él... quien me parece cada vez más lejano.

Guarde el arma, solo me di vuelta y regrese por donde vine. No sabía lo que había a mi alrededor y tampoco me importaba. Ese nudo en mi garganta y la sonrisa falsa que invadía mi rostro, era lo que me permitía seguir caminando sin rumbo fijo.

El humo del tabaco, el olor a alcohol, la luz negra... me acogen para que mi corazón no se desmorone.

Ese sentimiento extraño, de querer venganza pero a la vez necesitar amor...
en mi mente acepte que Hierro me tenía enamorada. Pérdida.
Y rota, muy rota. 

Estoy encadenada a las mentiras que solo él logra hacerme creer.

...

Mi mirada encontró a Hamir entre el humo...esperando donde lo deje, voy directo hacia él y lo beso.

Al principio no corresponde, parece sorprendido.  
Ni yo me reconozco, ni yo me siento viva.
Sus manos me atrapan desde la cadera. 

Mis labios se mueven frenéticamente y puedo jurar que lo estoy lastimando pero continuamos...
Me toma de las piernas, me abrazo a él y sin dejar de besarnos me lleva a una de las tantas habitaciones en el segundo piso.

Me deja sobre la cama y regresa a cerrar la puerta. Me pongo de pie cuando regresa a mi, me toma de la mejilla con suavidad y vuelve a besarme pero muy lento, lo empujo precipitadamente.

—Quitame el maldito vestido.

Parece ignorarme y vuelve a unir sus labios a los míos pero hago lo mismo que un momento antes pero alejándolo con más fuerza.

—Que no me escuchaste?! que me quites esto ya!

Al fin obedece y comienza a bajar el cierre lentamente hasta que el vestido resbala de mi cuerpo y cae en el piso.
Sigo perdida en sus labios, apenas me acuerdo de respirar aunque desearía no hacerlo nunca más... Caigo en la cama y él sobre mi, se deshace de su camiseta y luego de mi sostén negro... acaricia mi espalda y siento sus besos haciendo un recorrido de mi cuello hasta mi clavicula.