26. Armas para el corazón

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ZULEMA>>

Monica me mira nerviosa y puedo ver la duda en sus ojos... pero no dice nada y eso colma mi paciencia.

—Habla! coño! no me mires asi y habla de una puta vez!

-da un suspiro y baja la mirada-
—Esto paso luego del atraco... en el hotel. Macarena me confesó sus planes y de verdad que no pude hacer nada para impedirlo porque no recordaba muy bien sus palabras, no estaba muy despabilada...

-bebí el resto del tequila de mi vaso y con una mano la invite a proseguir- 

—Lo que me dejó muy claro es que el bebé que espera no es de Hierro. Me dijo que todo era un plan para darle una buena vida a esa criatura... tener un hogar estable, una familia... y Hierro deseaba lo mismo... pero contigo Zule! no con Maca. Ella lo engaño le hizo creer que era de él.
Lo que no acabo de comprender es... es porque él le creyo?... si no hubo nada entre ellos... o tal vez...
 -se alzó de hombros dándome una sonrisa tímida con la que quería enmendar su error-
 —bueno el punto es qu---

—A ver, a ver para ahí... te dijo todo eso y tu me lo dices ahora?? -empecé a reírme falsamente, con algo de molestia- —Ay Monica... si querias podias esperar a que me matara la puta Rubia o que se yo.. a que tuviera a su hijo.

—Ya te dije que no estaba muy bien. Mataron a mi familia Zulema!! -se puso de pie- 
—Perdí todo!!

-le hice una seña con la mano para que bajara la voz- —Ya ya perdón. Solo dime una cosa... por qué debería creerte? como se que no te envío Hierro para hacer que le crea?

—No tengo motivos para ayudarlos. No me importa lo que ocurra con ustedes dos... solo estoy aquí por el dinero que aún no nos repartes. -se cruzó de brazos apretando su prominente pecho- —Te estas tardando en dar lo que nos corresponde, te dejo en claro que vendi a mi propia familia por tu culpa...

—Todos hemos vendido o perdido a alguien importante en esta vida.
 repartire el dinero pronto.
Gracias por decirmelo... -hice una seña para que se retirara-

-Ella no me responde y sube las escaleras, la miro desaparecer y vuelvo a esconderme entre mis brazos.

...

Debo admitir que me siento menos preocupada al respecto... eso aclaro mis dudas principales pero me dejo con nuevas para las cuales gracias al tequila no tenía respuesta.

Que el hijo de Macarena no sea de Hierro me deja tranquila en cierta medida, pero lo que escuche en voz de él durante la fiesta... no tiene vuelta. Fue muy directo. Se irá con ella aun cuando tenga claro que no es su bebé... tal vez solo quiere una vida tranquila lejos de peligros, con estabilidad y una familia feliz; son cosas que no encontraría en mi. Y me duele tanto aceptar la realidad, pero se que lo merece... ese idiota merece todo lo bueno en esta vida aun si no es conmigo.  

Siento las lagrimas salir de mis ojos y mojar mi camiseta llegando hasta la piel de mis brazos... no quiero sentirme de esta forma. Seco mis ojos con el borde de la camiseta y me prometo no dejar que esto me afecte como una adolescente enamorada. Me levanto para ir a dormir... estaba muy mareada, asi como el mar de esta noche que choca tan fuerte en las rocas.  

Piso con dificultad el primer escalón de madera que emite un rechinido, que me hace parar porque no quiero despertar a nadie, con mi mano derecha me sostengo del barandal para no caer y tener que pedir ayuda a alguien... menos a Hierro.
Y asi voy avanzando hacia el segundo piso mirando escalones dobles e incluso triples y al fin llego al pasillo de paredes beige y me dirijo a la puerta de mi habitación, abro y al instante que me topo con Hierro sentado en el borde de la cama mirando la tv... me doy vuelta dispuesta a salir pero con su voz firme me hace detenerme en el marco de la puerta dándole la espalda.

🦂 ZULIERRO 🦂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora