21. No somos inmunes al pasado

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HIERRO>>

Mi mente estaba desconcertada, no sabía si Zulema sobreviviría pero quería hacer todo para salvarla. la coloque sobre la arena sus lágrimas caían despacio dejando un rastro por sus mejillas y a mi se me partía el corazón ... sabía que escuchó las palabras de Macarena claramente: "Hazlo por nuestro hijo"

—Macarena! no puedo... lo siento. No iré contigo... -hable sin mirarla y luego me incliné para tomar a Zulema de nuevo en mis brazos pero ella se negaba, pateaba y golpeaba con sus manos impidiendo que me acercara.

—Zule... perdoname... déjame ayudarte! -hable desesperado aun intentando acercarme-

—D-dejame! n-no me toques!! -hablaba con dificultad por el llanto y la debilidad que la sangre perdida le estaba provocando-

—P-porfavor! vamos al helicóptero! que van a llegar más refuerzos de Ramala o la policía!!! -me hinque en la arena pero ella seguía sentada respirando pesadamente-

—M-e importa u-una mierda!! -dio una patada y se quejó al mirar que la sangre en su pecho empezaba a salir con más fuerza-

-No lo pensé más y la cargue aunque se siguiera negando, de pronto dio un suspiro y se desmayó... empecé a caminar hacia el helicóptero que estaba a unos cincuenta metros... pero antes de continuar Macarena me hablo por ultima vez-

—Hierro... -dijo en voz baja.-

-Voltee y la vi con el arma entre sus manos apuntando hacia nosotros- 

—Lo siento... pero no voy a dejar que Zulema me robe los planes... 

-sabía que le dispararía a Zulema asi que me di vuelta al instante y la bala impactó en mi pierna... me queje pero trate de seguir... fue imposible, caí hincado tratando de que Zulema no se golpeara contra el suelo amortigüe la caída con mis brazos. Macarena corrió hacia mí y puso el arma en mi cabeza... Altagracia y Saray miraban desde el helicóptero pero no podían hacer nada ya que si disparaban... a causa de los movimientos erráticos las balas podrían impactar a Zule o a mi. Pero podía ver sus caras llenas de impotencia y enojo.
Volví a dejar a Zulema sobre el suelo con mucho cuidado.

—Alejate de ella!! -grito con la voz quebrada apuntando firmemente-

—Vale vale! me iré contigo pero no le hagas daño! -dije suplicando mientras cubría a zulema con mi cuerpo-

—Vamos... ya esta muerta que no ves? -señaló con la cabeza como la sangre manchaba la arena-

-Le di un beso a Zulema, sintiendo sus labios fríos y suaves... deseando compartirle un poco de vida pero su respiración ya era muy débil y aunque yo  sentía el dolor en mi pierna, el ver como se le estaba escapando la vida me dolía aun mas, las lagrimas no podían salir de mis ojos. Deje de besarla y acaricie su cabello- 

—Ya basta! vámonos! -Macarena me tomó del brazo y el arma en mi espalda. Me puse de pie con su ayuda y me guió hasta la camioneta sin quitar la pistola de mi cabeza... subimos y ella condujo dando vuelta para volver al Oasis... lo ultimo que vi fue como Altagracia bajaba del helicóptero corriendo hacia Zulema, la tomó en brazos y camino de regreso... escuche cuando despegaron y mire por la ventana hasta que el helicóptero se perdió en el cielo. Claramente me sentía un inútil, la había dejado allí abandonada, decepcionada.... Y aun me preguntaba como no podía hacer nada contra Macarena? por que me podía controlar a su antojo sin que yo reprochara?

—Ponte esto! -me lanzó un pañuelo- —Ata tu pierna para que la sangre se detenga un poco

—Llevame  al hospital... 

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