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14 años los gemelos

—¡¿Como lo hago?! ¡¿No se que hacer?! —gritó una y otra vez Kyo en desesperación.

—Relájate Kyo, estás muy acelerado. —habló preocupado Conan porbsu amigo.

—Kyo-kun deja de caminar de un lado a otro. —dijo Ai fastidiada terminando de servir la comida.

—Es cierto, papá, cálmate y siéntate a comer. —habló dulcemente Shina viendo su comida servida.

—Padre. —llamó Shiro deteniendo a Kyo. —Primero come. —volvió a hablar sentando al hombre de cabello castaño, para luego el volver a su asiento.

—¿Pero como la invito a cenar? —preguntó tal como si lo estuvieran asfixiando. —¡¡No se como pedirle matrimonio, estoy demasiado nervioso!!

—Primero cálmate. —lo regañaron los hijos Kudo, logrando su cometido.

—Es solo que... nunca había estado con una mujer tanto tiempo, de verdad la amo y no quiero embarrarla.—explicó Kyo.

—¿Nunca? —preguntó Conan sorprendido.

—Claro que no, tenía muchas cosas que hacer. —habló molestó entrecerando los ojos al mirar al detective.

—Bien, bien. —soltó Conan mirando fijamente su plato.

—Solo debes calmarte y ser tu mismo. —dijo Ai tratando de calmarlo sentándose junto a todos en la mesa.

—¡¡Ese es el punto!! ¡¡Soy un desastre!! —gritó volviendo a desesperarse el castaño.

—Pero ella ya sabe eso. —dijeron al unísono los Kudo's tranquilamente.

Empezaron a comer como si todos no hubieran dicho sus pensamientos a Kyo, este se encontraba avergonzado al ver a sus amigos y hijos de crianza que tenían un pensamiento en conjunto.

Tuvieron que ser Kudo's.

Penso el hombre resignado antes de comer igual que los demás.

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