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Los gemelos tienen 16 años

—¿Que pasa con esta reunión Miyu? —preguntó tranquila Ai cerrando su computadora en la que estaba trabajando mientras que la mujer llegaba.

Debido a que tuvo que salir de su trabajo de improviso.

Ai se cruzó de piernas al ver a su amiga nerviosa.

—Si, ¿qué pasa? Tiene que ser importante estaba en una reunión con mis subordinados, tuve que apresurarla. —le siguió gruñendo un poco Conan, al lado de su esposa dejando unas carpetas y lanzarlas a la mesa de centro.

Este estaba en medio de un gran caso de un asesino en serie, y seguía recolectando pistas para acorralarlo y encerrarlo, pero prefiero callar eso al ver a su amiga tan nerviosa.

—Es verdad, yo tuve que salir de prisa de mi club. —habló Shiro, con el uniforme del equipo de baloncesto, sentado en un sillón comiendo tranquilamente unas galletas de la mesa de centro. —Estaba en un partido importante.

—¿Eh? ¿Era clasificatorio? —pregunta preocupada Miyu, era una gran noticia pero podía aplazarlo.

—Si, pero Jomei se quedó a cargo  ganaremos. —respondió Shiro sin importancia.

—Que suerte por ti, Jomei me matará perdí una apuesta contra él y tuve que ir a animarlo como animadora. —refunfuño Shina soltando los pompones a los lados del sillón donde estaba. —Aunque la verdad me alegra. —volvió a hablar subiendo las piernas en el sillón aún con el uniforme de porrita.

—¡Cierra las piernas! —le reclamó Conan con el ceño fruncido.

Esta giro los ojos, aún haciendole caso y se acomodó para cerrar las piernas sin necesidad de bajarlas.

—Si, yo quiero ver esas fotos. —habló divertido Shiro siguiendo comiendo las galletas.

—¡¡Estas comiendo muchas Shiro!! —lo regaño Kyo, al lado de los esposos Kudo este estaba en silencio terminado un proyecto.

Estaba por terminarlo así que prefirió terminarlo mientras esperaba al igual que los otros.

—Bien. —murmuró disgustado dejando de comer.

—Solo lo dices por que Leily también perdió la apuesta. —dijo en un gruñido Shina.

—Obvio. —soltó Shiro sin darle importancia a la mirada de sus hermana.

—Los odio a los dos. —murmuró entre dientes, estaba segura que apesar de haber salido tan solo un par de minutos Jomei le habría tomado miles de fotos quien sabe en que momento.

El detective del lugar dio un suspiró divertido. —Se parece a ti. —habló recordando las veces que ella decía eso apesar de que no era verdad.

La científica no puedo evitar sonrojarse, pero como todos sabemos como es ella, se aclaró la garganta. —Como sea, ¿qué pasa Miyu? —preguntó para que volvieran la atención a la mujer frente a ella que los miraba divertida.

—¿Eh? S-S-Si. —soltó recordando lo que tendría que decir por lo que se puso aún más nerviosa. —Tengo una buena y una mala noticia.

—Quiero la buena. —habló Kyo.

—N-No prefiero la mala, emm la mala será que tendrán que llamar a Nakamura-kun por primeros auxilios. —dijo Miyu aún más nerviosa, sin para de jugar con los dedos.

—¿Eh? ¿Por qué? —preguntó confundido Conan.

—¿Po-Podrian hacerlo? —preguntó Miyu.

—Emm claro, yo le llamo. —le respondió Kyo, levantándose para tomar el teléfono en la mesa de centro.

Todos se miraban confundidos.

—Listo, ¿ahora?

—La buena noticia es... que estoy embarazada. —susurró con la voz temblando.

Y con esa noticia Kyo-kun se desmayó mientras que los Kudo's felicitaban a la mujer.


Terminó siendo más larga de lo que me esperaba, pero no se acostumbren 😅😅😅

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