Destinados Antes de Nacer El Comienzo © || Libro #0.2|| [BtsxJin] (Omegaverse)

Capítulo 185

Maratón 2/?

Se despierta al no sentir el calor y aroma de SeokJin. Su lobo y él gruñen al recordar la razón por la cual no está, y para eliminar su mal humor opta por ir a la cocina y tomar un poco de agua, o jugo de banana mejor. Sin embargo, al salir y caminar por el pasillo rumbo a las escaleras logra escuchar un sonido extraño; frunce el ceño confundido y se detiene solo para escuchar, de nuevo, el sonido extraño.

Dudando si es una buena idea o no, decide seguir aquel extraño sonido; su curiosidad crece al descubrir que proviene del dormitorio de NamJoon.

—Uh, que raro...

Se dice al llegar a la puerta debido a que el líder del grupo no es de quedarse despierto hasta altas horas de la noche y siente el rostro caliente al escuchar con más precisión el sonido extraño el cual no resulta ser más que el sonido de pieles chocando. A JungKook le resulta difícil creer que el moreno alfa haya traído a alguien para pasar la noche, es decir, se lo puede esperar de TaeHyung; pero de NamJoon jamás. Es decir, el maknae admira mucho al líder del grupo, prácticamente se unió a la empresa luego de escucharlo rapear y velo; lo respeta y quiere bastante, es un alfa ejemplar. Es más, NamJoon vendría ser su modelo de alfa a seguir, por lo que no puede creer que haya traído a alguien para tener relaciones sexuales en el departamento principal ya que está prohibido; puedes irte a hoteles o pedir una cita en esas casas, pero no hacerlo en eñ departamento que la empresa alquila.

— ¿Qué hago?

Se pregunta con angustia debido a que si el alfa mayor no es cuidadoso, esa persona puede ser vista saliendo del departamento; el recepcionista puede decirle a la empresa y si eso sucede muchos problemas vendrán no solo para NamJoon, si no para el grupo, también. Así que, sin tener otra opción, gira la perilla despacio sin hacer ruido y tomando valor levanta la mirada para buscar la obscena escena.

Efectivamente, el líder del grupo está teniendo relaciones sexuales. Efectivamente, está sobre alguien. Efectivamente, está follando a alguien. No obstante, la mente de JungKook no comprende por qué ese alguien es nada menos que su hyung.

No entiende, por qué su hyung está debajo de NamJoon gimiendo. No entiende, por qué está pidiendo más. No entiende, por qué está con los ojos vendados y las piernas abiertas. No entiende, no entiende nada de lo qué está pasando.

— ¡Oh! ¡Joder!

—Ah, cielo. Me aprietas de maravilla...

—Más, ¡Joonie! ¡Más!

Por qué, es lo que se cuestiona JungKook con lágrimas descendiendo por su rostro. Por qué su hyung está siendo tratado de esa forma, por qué está gritando de placer si los movimientos de NamJoon son bruscos; más cuando agarra las caderas de su hyung y lo voltea, haciendo que su rostro quede contra el colchón y arrebata con más fuerza.

— ¡Joonie! ¡Sí! — No es su hyung. Claro que no lo es. No puede ser— ¡Aaah! ¡Ngh!

—Te gusta, ¿no es así? — Lo agarra de los cabellos y lo folla con más ferocidad—. Mierda. Te amo, te amo, cielo.

— ¡Te amo! ¡Te amo! ¡Joonie!

Grita al sentir cómo es llenado con abundancia y arquea la espalda al correrse, también. NamJoon le da la vuelta y quita la venda para besarlo con ternura. Sonríe durante el beso por qué le gusta esa cambiante faceta de su alfa; lo ama por eso.

—Eres hermoso...

Le susurra besando sus mejillas las cuales deben estar rojas y está a punto de responderle, sin embargo, sus ojitos visualizan algo inusual en el dormitorio, y todo color abandona su rostro al descubrir a JungKook quien está igual de pálido, y no deja de llorar en silencio.

—Ko-Ko... —apenas puede hablar—, ¡no! ¡Espera! ¡Joder!

Empuja a NamJoon sin querer y recoge su ropa interior para ponérsela, mientras persigue al maknae quien se ha encerrado en el baño más cercano.

—Ko-Kookie —lo llama intentando abrir la puerta—. Por..., por favor, abre... —silencio—, Abre, por favor, Kookie —ruega girando la perilla con seguro con desesperación— ¡Por favor! ¡Debemos hablar! — Escucha un fuerte llanto y su omega aulla de tristeza, y comienza a ponerse intranquilo — ¡Kookie! ¡Por favor! — Toca la puerta con fuerza y el sonido se mezcla con los llantos del menor— ¡Abre la maldita puerta! ¡JungKook! ¡Jeon JungKook!

Grita con los ojitos llenos de desesperación y su respiración se acelera; su lobo no deja de exigirle que consiga entrar a ese baño. NamJoon sale y se acerca con preocupación al ver al mayor tan alterado, no lo reconoce.

— ¡Abre! ¡Abre! ¡Abre! — Repite sin importarle que sus palmas estén rojas— ¡JungKook, abre la puerta! ¡Si no la abres, la voy a tirar! ¡Me oyes! ¡La tiro! ¡Joder! ¡Jeon! ¡Abre! ¡Joder! ¡Abre! — Nada. Solo llanto, un doloroso llanto lleno de sufrimiento— ¡Te lo iba a decir! ¡Te juro que lo iba a decir! ¡Yo te lo iba a decir! ¡Lo juro! — Siente unas manos sobre sus hombros y pierde la razón— ¡No! ¡No me toques! ¡Qué haces! ¡Qué haces! ¡No!

Es apartado de la puerta por NamJoon.

— ¡No! ¡Debo hablar con Kookie! ¡Kookie! ¡Kookie! — Lo llama con la garganta desgarrada y patalea en el aire— ¡Perdón! ¡Perdón! ¡Hyung lo lamenta! ¡Hyung lo lamenta! ¡Kookie! 

El líder del grupo encierra a SeokJin en su dormitorio y trata de calmarlo. Su actitud lo tiene desconcertado, sabe que algo no está bien para que haya reaccionando de esa forma; sin embargo no está para buscar una lógica a ello. Ahora, debe tranquilizar a su pareja cómo sea, y la mejor opción que tiene es desprender una fuerte cantidad de sus feromonas para conseguir que se desmaye y suspira aliviado cuando lo consigue.