Capítulo 239

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Le envía un mensaje a SeJin informando sobre que acaba de haber una avalancha y considerando que la nieve cubre hasta la mitad de las ventanas, ha sido una fuerte. Mientras espera su respuesta, ingresa a la zona de noticias del lugar y confirma, efectivamente, que acaba de haber una avalancha de gran magnitud por la zona donde se encuentran. Ruega para que ninguno de los chicos haya sufrido un accidente durante la sesión de fotos y escribe en el chat grupal su preocupación; el primero en responder es NamJoon escribiendo que se encuentran bien, los cinco, pero tal parece no pueden regresar a la cabaña por toda la nieve que hay. Por el momento, se están quedando en una cabaña de unos turísticas junto con el staff de la empresa y de la empresa de ropa.

Su celular vibra indicando el mensaje de SeJin. Este le dice que se quede en la cabaña junto con el integrante mayor de BTS hasta que un equipo de rescate despeje la zona llena de nieve y ellos puedan ir; también, le dice que no se preocupe, mientras se queden en la cabaña estarán a salvo. Le responde que ha entendido; por lo que, sale de la habitación para avisarle a SeokJin.

— ¿Jin hyung? — Lo llama al encontrarlo sosteniéndose de la pared del pasillo.

Corre hacia él cuando ha notado que se iba a caer y lo sostiene de los anchos hombros.

— ¿Jin hyung, qué tiene?

—Ji-Jimin —balbucea con sudor en su frente y sus ojitos apenas consiguen estar abiertos.

—Ay, no —susurra creyendo que se ha vuelto a enfermar—. Descuide, Jin hyung. Lo llevaré a su habitación.

El omega vuelve a balbucear, siente demasiado calor; aún así, deja que Jimin lo lleve con cuidado hasta su cama para acostarlo y busca las pastillas que el staff del equipo médico le recetó la noche de ayer.

—No quiero —no acepta las pastillas y le da la espalda—. Me duele mi estómago…

—Ah, no me diga que la chocolatada le cayó mal —menciona preocupado y su lobo se pone inquieto cuando escucha la queja de dolor por parte del contrario—. Le voy a preparar un té, Jin hyung. Ahora regreso.

Vuelve a quejarse, mientras abraza su estómago y se hace bolita en la cama. Sus ojitos se nublan por las ganas que tiene de llorar y hace un puchero, involuntario, cuando el alfa de baja estatura abandona la habitación.

Suelta su tercer suspiro cuando SeJin le dice que deben quedarse en la cabaña de los turistas junto con el resto del staff hasta que los rescatistas despejen todos los caminos, los cuales fueron cubiertos de nieve, y sea seguro circular de nuevo

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Suelta su tercer suspiro cuando SeJin le dice que deben quedarse en la cabaña de los turistas junto con el resto del staff hasta que los rescatistas despejen todos los caminos, los cuales fueron cubiertos de nieve, y sea seguro circular de nuevo. Uno de esos caminos lleva a la cabaña en donde se encuentra Jimin y su omega; está preocupado por ambos.

—Puedo unirme a los rescatistas —dice el maknae con confianza—. Así llegó con mi hyung.

—No creo que te dejen —comenta TaeHyung revisando el chat grupal para ver si su compañero 95 ha escrito un nuevo mensaje—. Solo nos queda esperar.

JungKook bufa cruzando los brazos y se sienta desparramado sobre el sofá. No quiere esperar, quiere ir con su hyung y estar con él; estuvo enfermo, así que está preocupado sobre cómo estará ahora.

—Oh, esto no es bueno —escuchan que dice Hoseok con el celular en la mano.

TaeHyung aprieta los labios al leer el nuevo mensaje del alfa de baja estatura, quien les escribe informando que su omega está mal de salud de nuevo.

— ¡Definitivamente! ¡Debemos ir! — Exclama JungKook poniéndose de pie.

—Sentado, cachorro —le dice YoonGi leyendo el mensaje desde el celular del líder del grupo—. Llamarás la atención.

— ¿Qué hacemos?

—No podemos ir. No hasta que los rescatistas despejen los caminos —le responde el alfa de tez morena a Hoseok—. Solo nos queda avisar al equipo médico para que le digan a Jimin que nueva receta le dará a Jin.

El maknae hace una pequeña rabieta al no estar del todo de acuerdo. Sin embargo, una parte de él le recuerda que no tienen otra opción y que debe comportarse de la mejor manera para no levantar sospecha ni rumores; ya que, todavía, las miradas siguen sobre ellos.

—Espero no tarde mucho —dice TaeHyung revisando la hora: son las siete de la noche—. No creo que avancen mucho.

—Hay que rogar que para mañana, al menos un camino esté libre —comenta positivo Hoseok—. Y que no haya heridos.

Los demás alfas asienten con expresiones de preocupación debido a que la avalancha sí fue fuerte. Fue un milagro, si se podría decir, que ellos se encontraban en la parte baja cuando ocurrió el desastre natural. Ni bien se dieron cuenta, corrieron a la cabaña más cercana y pudieron salvaguardarse junto con el staff tanto de la empresa como de la empresa de ropa. No hubo ningún herido o lesionado, así que deben agradecer aquello.

—Jimin dijo que le haría una taza con té —avisa TaeHyung con un mal presentimiento— ¿Le escribiste al equipo médico?

—Sí. Aún, no responde —le responde NamJoon y el manager lo llama desde la distancia—. Ya regreso.

—Lo mejor será descansar —propone Hoseok para que los dos jóvenes estén calmados—. Necesitaremos energía.

JungKook asiente al estar de acuerdo, aún así, su mente sigue preocupada por su hyung. No está acostumbrado a dejarlo enfermo; siempre que estaba mal de salud se quedaba en departamento principal a cuidarlo o le traía comida deliciosa para que se sienta mejor. Por eso, a su lobo le resulta extraño estar alejado de su pareja, más sabiendo que está mal.

Por otro lado, al alfa de tez pálida le llega un mensaje privado por parte de Jimin. Frunce el ceño debido a que es inusual que le escriba fuera del chat grupal.

Al abrir el mensaje y leerlo, sus feromonas se tornan agrias.

Escribe su respuesta con un mal sabor en la boca a Jimin, sin embargo, cuando le da enter para enviar el mensaje le sale un aviso diciendo: no hay señal.

—Mierda —masculla apretando el artefacto entre sus manos y dirige su mirada hacia la ventana para observar el oscuro panorama, el cual está cubierto con nieve.

YoonGi duda tanto que los rescatistas puedan despejar los caminos para mañana. Aunque, en realidad no importa si lo consiguen, igual ya sería demasiado tarde debido a que SeokJin ha entrado en celo y solo tienen hasta la madrugada para que su lobo no tome por completo sus acciones.

Destinados Antes de Nacer El Comienzo © || Libro #0.2|| [BtsxJin] (Omegaverse) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora