New Rules! (KookV/Yoonmin)

Regla 6

Regla 6: el otro lado de la moneda
Yoonmin

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La vida tiene extrañas formas de actuar. Eso fue lo que pensó YoonGi, cuando sus sentimientos por un chico comenzaron a florecer. A ojos de sus padres y sus amigos, el pálido era el estereotipo de un adolescente que en su vida adulta sería exitoso, que equivocados estaban porque nadie podía prever que él caería rendido a los pies de un pelirosa de gafas, con lengua viperina y linda sonrisa. Nadie lo sabía, ni siquiera el mismo Min YoonGi.

El azabache no se consideraba gay, eso era para los idiotas que no sabían que hacer y querían darle un nombre a sus acciones cierto que él mantenía una relación con Jimin y que le gustaba besarlo, apretarlo entre sus brazos y verlo sonreír, pero él no era un homosexual o un bisexualidad desviado, a él no le gustaban los chico o las chicas a él le gustaba Jimin y punto final, más últimamente comenzaba a cuestionar su manera de haber hecho las cosas con el pelirosa. YoonGi odiaba las etiquetas, era un hecho que él tenía una reputación, popularidad y es cierto también, que sí, tomaba en cuenta lo que los demás dijesen y eso afectó su relación con su precioso novio.

¡Lo odiaba joder! Odiaba sentirse culpable, desde que Jimin le había planteado sus reglas su estrés había crecido en demasía, casi no dejaba de pensar y si se descuidaba, su mente le jugaría malas y pesadas bromas. Entre una de las reglas que su novio le había impuesto, era que si él no le hablaba en la escuela entonces Jimin haría lo mismo, ojo por ojo le dijo su novio pelirosa.

Ahora YoonGi sentía las consecuencias, Jimin cumplió la regla. Ya no más miradas intensas entre ambos, sonrisitas y escapadas a las gradas para besarse, Min ya estaba acostumbrado a los mimos del menor y le pesaba cuando veía al chico en los pasillo y este ni siquiera le dirigía una mirada. Todo era una mierda y él solo se lo había buscado.

El agua salpicó sus gafas, volviendo a traerlo a la realidad de una. Se había perdido de nuevo en sus pensamientos en medio de un entrenamiento, braceó un poco y al fin pudo tocar la pared de la piscina, sonriendo un poco, cuando escuchó el silbato del entrenador.

—¡Nuevo récord Min!— lo felicitó el mayor nada más salió de la piscina— Eres un increíble nadador muchacho, las estatales serán pan comido si sigues así — palmeó la espalda del pálido y se fue.

Sus demás compañeros también le dieron alagos que aceptó chocando las manos y los hombros. Cuando se quedó solo frente al agua azul y el intenso olor a cloro lo mareó, soltó un suspiro desganado tomando rumbo a las duchas. Quería arreglar las cosas con Jimin, si no una nube negra lo perseguiría por lo que restaba de la preparatoria, YoonGi tenía claro que haría todo por su pelirosa, para conservar esa linda sonrisa del menor más algunas cosas eran...difíciles, pero ya era tiempo de afrontar su cobardía y aprender que ser honesto es la mejor decisión.

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YoonGi se rascó la nuca nervioso, el perro de peluche en su mano derecha temblaba un poco. Era un gran esfuerzo el que hacía para no perder el valor y salir huyendo de ahí, ¡Parecía un tonto!, tomó una piedra pequeña del bonito patio cubierto de tulipanes apuntó a la ventana de su novio y acertó, esperó un poco como no hubo reacción volvió a intentarlo esta vez la luz de la habitación se encendió un pelirosa con cara de pocos amigos salió a la ventana. No llevaba sus gafas habituales y a YoonGi no pudo no parecerle hermoso el cabello de algodón de su Minie en todas direcciones y sus ojitos tratando de verlo en la oscuridad.

—¿Qué demonios?...¿YoonGi?— su escasa vista solo pudo identificar la pálida piel del contrario— ¿Qué haces aquí? —le preguntó.

YoonGi no supo que responder y solo suspiró tomando aire después y soltar todo.

—Vine a disculparme— se atrevió a decir.

Jimin se cruzó d brazos y enarco las cejas.

—¿Por qué? Y no pudiste hacerlo mañana cuando no este durmiendo —razonó Jimin, su novio pareció sentirse avergonzado pero siguió hablando.

—Por ser idiota.

—Lo has sido desde que empezamos a salir no es ninguna novedad para mi Yoonie— Jimin hizo un ademán con la mano recostandose sobre el marco de la ventana sonriendo coqueto—Ya estoy acostumbrado.

El pálido sonrió, cuando Jimin lo llamaba Yoonie era buena señal. Jimin no estaba enojado con YoonGi, bueno, no tanto. Su hermano le había dado el consejo de que ignorara a Min durante algunos días y lo vería comiendo de su mano como un cachorro sin dueño, nunca se esperó que YoonGi viniera a media noche a su casa a pedir disculpas de lo que ya Jimin estaba por más de claro.

—Lo sé, es que no puedo evitarlo.

—Ya lo creo.

— Soy un idiota Minie.

— El más grande— objetó Jimin sarcástico.

— El más grande de los idiotas — rectificó YoonGi, sus ojos clavados en el lindo rostro del pelirosa.

—Y...¿te quedarás ahí toda la noche mi más grande idiota o subirás?.

YoonGi se sintió feliz, trotó hasta el árbol junto a la ventana de la habitación de su novio.

Jimin sonrió para sus adentros una parte de él se reprochaba por ser débil, pero la otra saltaba de felicidad porque el pálido había venido a buscarlo, puede que el azabache fuera el más grandes de los idiotas por lastimarlo y no tener una relación normal sin ser un secreto, pero de algo estaba seguro Jimin, es que amaba con toda su alma a su idiota Min YoonGi.

N/ A:

Gracias a aquellas personitas que votan~💖 me hacen muy feliz!!!

Espero que les guste el cap!!

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Leer sin votar es como tocarle los senos a la autora y salir corriendo XD!!

Un cap más serio para conocer la otra cara de la moneda de ambas parejas.