(1) In Your Care (Adrinette) +18

*.◦ °◦✯◦°◦ Capítulo 27 ◦ °◦✯◦°◦.*

Marinette llegó a la celda y tomó el peine.

«Bueno, nunca había funcionado antes, pero me hace sentir más a salvo. ¡Maldición por qué no había terminado de escuchar lo que los chicos estaban diciendo! »

Eso habría sido más simple y no habría tenido que esperar ansiosa, preguntándose qué rayos le haría Adrien en cuanto regresara.

No había mucho tiempo entre la cena y cuando cerraban las rejas.

« No pasaría mucho antes de que Adrien regresara. »

Marinette se sentó en la cama inferior, agarrando mortalmente el objeto en sus manos y lista para usarlo, hasta que apareció Adrien.

Trató de aparentar normalidad.

« Le debía todo a Adrien. De no ser por él, ella ya habría sido ultrajada un par de cientos de veces. Adrien nunca la había tratado mal y la había tenido bajo su protección por más tiempo de lo que habría tenido a cualquiera. Era su trabajo complacer a Adrien, aún si eso significara que Adrien la lastimaría... Tal vez era un tipo extraño de acto sexual, en el cual golpeabas a la otra persona mientras lo hacían. Dolor extremo mezclado con placer extremo. »

De alguna forma, eso no hacía que Marinette se sintiera menos asustada, así que se limitó a apretar su agarre mientras Adrien se acuclillaba frente a la cama.

Marinette dio lo mejor para estar calmada y no retroceder cuando Adrien acarició su mejilla.

—¿Qué? — el rubio preguntó, su tono de voz era gentil y no sádico como Marinette había esperado.

Uno de sus largos dedos recorrió los labios de la azabache antes de alzar su mentón, sin dejar que Marinette dejara de mirarlo.

—¿Qué de qué? — La ojiazul regresó la pregunta de forma brusca, peleando por mantener su rostro libre de emociones, pero sabía que había fallado al ver la sonrisa de Adrien y su ceja levantada.

—De acuerdo, ¿qué has hecho ahora? — preguntó Adrien, sentándose en el borde de la cama y acercándose para cerrar la distancia entre ellos, le importaba poco la insolencia de Marinette, eso significaba que se sentía más cómoda con él y no había nada que el encantara más a Adrien que el verla cómoda a su lado.

—Has estado a solas alrededor de... dos horas...

—¡Nada! —protestó ella.

—Uh-huh... Ok, no te creo. — murmuró Adrien, sin estar convencido, antes de depositar un corto beso en los labios de Marinette.

La azabache no estaba preparada para eso y habría roto el contacto de no ser porque Adrien la tenía sostenida por la cintura.

—No hice nada, lo juro. — Marinette insistió cuando el beso terminó y Adrien la miró divertido antes de presionar sus labios sobre la sensible zona del cuello de la azabache.

Marinette pudo sentir los escalofríos bajando por su espalda pero no estaba segura de sí era de miedo o placer.

Las manos de Adrien fueron de su cintura a su espalda, acercándola más a él.

Marinette quería disfrutar la sensación que la recorría cada vez que el rubio le hacía algo así, pero ahora mismo estaba esperando nerviosamente a que Adrien empezara a ser rudo con ella.

—Ow. —Marinette escuchó que Adrien murmuraba en su oreja antes de ver sobre lo que se había sentado. —¿Sabes? Hay quienes dicen que un peine en la cama significa que quieres que te golpeen en el trasero. — Comentó mientras tomaba el peine, que Marinette no sabía ni en qué momento lo había soltado, y lo dejaba en su lugar.