Dia 21: Cambiaformas.

285 26 10
                                    

Primera parte.

Prólogo

Sus ojos infantiles observaron maravillados el agua cristalina que caía de la cascada en la entrada del centro de reunión. Caminado detrás de su padre y líderes de su pueblo, Steve no quitaba la vista de todo lo que había ahí.  
Plantas de colores, aves, nidos colgantes y mariposas. Ademas los rayos del sol naciente que se friltraban por las pequeñas aperturas entre la vegetación.
Su emoción permanecía latente desde que supo que iría a la reunión, aún cuando el comandante del ejército no estaba de acuerdo, alegando que era un mocoso aunque Steve sabía la verdadera razón que estaba lejos de aún ser un niño. Sin embargó su padre había aceptado su pedido para conocer dónde se reunía los cuatro.

—Algun día tú serás el alfa —le había dicho— y es necesario que conozcas a los cuatro.

Los cuatro del valle.

Divididos por cada región, las criaturas que vivían en él se reunían cada año para mantener la comunicación y paz entre ellos.

Por el norte estaba ellos, los dragones. Liderado por su padre el cual era un dragón más largo que alto, de escamas oscuras, con el poder de volverse invisible. En el este estaba las hadas, liderado por su reina. Por el oeste los espíritus del bosque y finalmente por el sur, los cambia formas.

Steve solo había visto a los espíritus del bosque, los cuales eran cercanos a los Dragones, de los demás sólo había escuchado por su padre y algunos otros dragones de su comunidad. Aunque estos últimos contaban cosas estrañas de las hadas, indicando que solían aparentar belleza pero cuando se enojaban eran las más espantosas de las criaturas. Sobre los cambia formas tenía poca información, solo que al igual que los dragones, eran una población reducida.

Así que esa sería la primera vez que los vería.

Cuando llegaron al área de reunión, el cual era una gran sala con una especie de árbol pequeño en el centro. Su padre, el capitán del ejército y el asesor principal se ubicaron a lo que sería el norte. Steve se sentó detrás de ellos, intentando encontrar una apertura entre su padre y el asesor para ver a los demás.

No pasó mucho tiempo cuando los demás fueron llegando, primero uno de los espíritus del bosque, de aspecto extraño como un tronco de árbol viejo, pero con flores púrpuras en la cabeza. Algo de los espíritus del bosque del oeste era que no había líderes ahí, según su padre ellos estaban conectados de una manera que nadie podía comprender, como si fueran uno solo y muchos a la vez, los espíritus tomaban formas similares a la naturaleza vegetal para mostrarse ante otras criaturas pero en realidad eran seres sin formas que se movían libres en el bosque.

Poco después llegó la reina de las hadas, realmente era hermosa cómo había escuchado. Con un cabello largo y castaño claro, sus ojos parecían apacibles a diferencia de las dos hadas a su lado, un hombre con mirada fría y una mujer que parecía buscar amenazas.
Y finalmente, apareció él.

El lobo Blanco, el alfa de los cambia formas.

Era aún más grande de lo que había imaginado, cuando alguna vez había escuchado que el sur estaba protegido por un "gran lobo blanco", su pelaje era como la nieve en invierno, y se movía de una manera imponente. El lobo blanco era una mezcla entre belleza y autoridad.
Entonces mientras lo observaba, los ojos de aquel lobo se fijaron en los suyos.

Celeste y gris, aquellos ojos era como el cielo antes y durante de la lluvia, cuando las nubes grises de se apoderaban del cielo azul y cubrían el sol.
Steve sostuvo la mirada en aquellos ojos, hasta que empezó a sentir como el lobo veía dentro de él. De su alma original, de su alma humana.

Fictober Stucky 2020Donde viven las historias. Descúbrelo ahora