Arquitectos +21

Chapter 1

Primero que nada quiero decir que no soy una escritora profesional, pero solo quiero demostrar mis letras hacia ustedes y me den una oportunidad de leer este tipo de historia, trataré de corregir los malos errores y si ustedes lo ven me ayudan comentando para así corregirlo muchas gracias por entrar al primer capituló espero me leas mas si te gustan este tipo de historia. Si gustan pueden votar y comentar tampoco los puedo obligar hacerlos pero me alegrarías el día.

Si más nada que decir los dejo con el primer capituló, disfrútenlo como yo lo hice escribiendo.

Chapter 1

Meneo mis caderas en círculos, mientras pasó mis manos al rededor de su cintura jugando con el elástico de su bóxer, quiero tocarlo quiero sentirlo.

Quito el elástico de su bóxer mientras el ayuda levantando sus caderas para quitarlo por completo el está tan excitado que no me importa dejarlo así pero quiero saciare de placer y para eso lo tengo a el.

tomo su miembro entre mis manos el gime al sentir el contacto de mis manos.

—ssh nada de gemir—

—quiero estar dentro de ti—

—Aquí no haremos lo que tú digas aquí el sumiso eres tú y ya deja de hablar.—

Paso mis manos por mis pechos los masajeo quito mi sostén y lo tiro al aire tomo una de sus manos para que apreté mis pezones erecto, bajos sus manos hasta mi intimidad y hago que sienta cuanto mojada estoy.

—oh dios.

—Aquí no hay ningún dios, dime ¿quién es el dominante acá dios o yo?.

Meneo mis caderas el entierra sus dos  dedos dentro de mi humedad y yo trato de no gemir pero el placer me domina y gimo en su oído.

—Sientes lo húmeda que estoy.

—Si.

Paso mis bragas a un lado para poder tomar su miembro con mis manos y pongo un preservativo en el para poder ubicarlo en mi entrada.

Subo y bajo meneo mis caderas en círculos, el trata de soltar sus manos amarradas mientras su boca está abierta y hace un movimiento para poder morder sus labios, rico.

Subo y bajo por su entrepierna mientras busco sus labios para poder morderlos.

—Estoy apuntó, no te detengas.

Con tan solo decir eso el se corre mientras  yo finjo mi orgasmo porque no pude llegar.

Quito la soga la cual estaba amarrada en su mano, la venda en sus ojos y por último la soga en sus pies.

—Ya te puedes ir.

—cuando nos vamos a volver a ver.

—Nunca más, no me serviste ahora vete.

El sale mientras recoge su ropa y zapatos.

Una noche más sin tener un buen orgasmo.