El famoso abogado Itachi Uchiha quiere un heredero. El gran Alpha estaba convencido de que podría llegar a un acuerdo conveniente con la contraparte. Su oferta era ofrecer lo que fuera pero tenía condiciones este "Contrato" eran muy simples; él pose...
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La mañana era fría se dejaba sentir el frió del mes de septiembre las hojas de los arboles empezaban a tornarse de ese bello color ocre dejando caer su hoja convirtiéndose en un manto hermoso una bella obra de arte que dibujar.
Itachi se preparaba para ir a trabajar con una visión diferente a como la tenía el día anterior, ese día haría el mejor contrato o mejor dicho compraría un vientre para que gestaran a su heredero.
Izumi estaba viendo cómo se arreglaba Itachi era un deleite ver ese hermoso cuerpo, ella misma se preguntaba.
"¿En qué momento deje de amarlo? ¿Qué fue lo que paso entre nosotros?"
La voz fuerte del Alpha se dejó escuchar en la habitación haciendo estremecer a la Omega que le puso atención de inmediato.
- Me retiro, vendré por ti, para conocer a esa persona.
Izumi iba a replicar pero al ver esos ojos color carmesí se la pensó mejor y bajo su cabeza era cierto tenia culpa por no decirle la verdad ahora Itachi no le pedía opinión en lo que se iba hacer de ese instante.
- Estaré lista cuando llegues.
Salió de la habitación dejando a la Omega pensativa.
"¿Quién será esa persona que va darle el heredero?"
Se levantó para poder bañarse y estar presentable en el momento en que llegue el Uchiha. El azabache a un estaba en la mansión recogiendo algunos documentos de los cuales eran para llevar directo a los juzgados.
Al salir del despacho escucho que abrían la puerta dando los buenos días dejando un hermoso arreglo floral.
Solo observo se quedó viendo la asistente firmo el pedido se acercó para ver la tarjeta dando un hecho que eran de sus padres pero fue Sasuke quien las envió para que tuviera una leve reconciliación con Izumi.
Itachi solo movió su cabeza no se consideraba un romántico, nunca fue de esa manera y no quería comenzar con eso.
- Tíralas a la basura.
-Como usted diga señor.
La asistenta se fue a dejar el hermoso arreglo floral a la basura, arrepintiéndose ya que eran flores muy exóticas.
Itachi llego hasta su auto deportivo se montó en él y salió de la mansión dejando a Izumi en un estado de alerta.
Al ver que Itachi se iba tomo su móvil para hablar...
- ¡Pasa algo!
- No podré ir, Itachi vendrá por mí para ir a una entrevista.
Al otro lado de la línea solo se escuchó el respirar molesto que no volvió a emitir ninguna palabra sin saber en qué momento colgó.
Izumi vio su figura en el espejo dejo escapar un suspiro no era momento de sentimentalismos entre ellos había ese acuerdo, ella acompañaría a su esposo en las reuniones que se le presentaran.
