-Vamos ____ la nueva casa está por aquí-Me dijo mi madre.
Había una linda casa, supongo que era la nuestra. Habían bastantes arboles, casas muy grandes, jardines preciosos. Creo que es en lo único que pienso, pues que bien para ser una simple niña de cinco años.
Pude ver a un niño en la casa de al lado, estaba jugando con sus autos en el jardín. Sonreí, creo que podía ser mi amigo.
-Mamá-llame su atención-¿Puedo ir a hablar con él?-Señale al niño de cabello negro.
-Si, esta bien-me dijo ella-Pero no tardes.
-Esta bien mamí-Tome mi oso de peluche y fui donde estaba el.
Cuando me iba acercando pude verlo con más claridad, tenía un camión de juguete. Y varios autos también.
-Hola-Dije amablemente.
-Hola-Dijo el de la misma forma.
-¿quieres ser mi amigo?-Le pregunte, y el asintió.
Después de eso me senté a jugar con el, hasta que mamá me llamó para cenar.
12 de septiembre de 2020
-Y así puedes hacer un pastel con solo cinco ingredientes-Termino el video de YouTube.
La verdad quería hacer un pastel pero me daba pereza, así que mejor pedí una pizza y me senté a ver películas de Netflix.
Terminó la primera película y la pizza se había acabado, debería hacer algo productivo por mi vida. Pero me da pereza. Fui a la cocina y tomé unos Cheetos, abrí la bolsa y le di Play a la siguiente película "¿¡y donde están las rubias!?" Hasta que sono el timbre.
-¿Quién?-Pregunte desde el sillón con mi cocacola en la mano.
-Finn-Dijo desde afuera.
-Ah-Volví a reanudar la película, hasta que volvieron a tocar el timbre-¿quién?-Volví a preguntar.
-Finn-Dijo desde afuera.
-Ah-Volví a darle un sorbo a mi cocacola, pero desgraciadamente volvió a sonar el timbre-¿Quién?-Pregunte.
-Finn ¿puedes abrir la puerta de una maldita vez?-Exclamó molesto desde afuera.
-Lo siento, mi mamá no me deja hablar con desconocidos, vuelva más tarde-Grite.
-¡Abre la maldita puerta!-Tocó el timbre seguidamente.
-¡Mierda!-Exclame.-Fui hacia la puerta y la abrí.-Puedo denunciarte por invasión a la privacidad, y por causar alboroto en mi hogar.
Al abrir la puerta pude ver como la mirada de Finn bajó hacia mis senos.
-¡mi cara está aquí depravado!-Le alegue.
-Tienes granos en tus senos-¡Basta! Nadie ofende así a mis hijos planos.
-¿Que quieres?-Pregunte molesta.
-Solo quería disculparme, mi perro Arrocito destruyó tus flores.-Mi cara se deformó.
-¿Que el perro arrocito hizo que?-Dije asustada.
Aparte a Finn para salir a ver lo que ese perro desgraciado le había hecho a mis flores, había dedicado semanas a esas flores. Vi al perro rasgando mis flores.
-¡Largo! ¡Vete de aquí!-Le dije al perro.
-Ya te pedí disculpas-Dijo Finn-Arroz, ven amigo. Ven aquí-Llamo al perro.-Buen chico
-Vas a pagar con esto-Dije frunciendo el ceño.
-¿Y que harás?-Dijo Finn-Yo no tuve la culpa, fue Arrocito. Buen chico-lo acarició.
-Cuidate mientras duermes, cuidate mientras caminas, cuidate Wolfhard.
-¿Y que puedes hacer tu?-Rio-¿que puede hacer una chica como tu, a un chico como yo?-Volvió a reír-No te tengo miedo.
Me moleste, y lleve mi puño hasta su entrepierna.
-No me provoques.-Dije para despues pegar le.
-¡Maldición ____!-Dijo con dolor en la entrepierna.
El era bastante alto a diferencia mía, así que golpear su entrepierna no fue un problema.
-Si vuelves a molestarme te rompo la pierna-Dije amenazantemente.
-Tu eres quien molesta-protesto-Te pedí disculpas en nombre del perro.
-¿Por qué dejaste que destrozara mis flores?-Proteste.
-¡Por qué no lo vi!-Alegó.
-Jodete ¿Que dedo quieres que me chupe?-Dije enojada. El sonrió pícaro.
-Ninguno ¿por qué mejor no chupas mi...?-No lo deje terminar.
-¡Vete al diablo Finn!-Dije molesta-¡No quiero ver a tu perro por aquí!
-Como sea-se fue junto con el perro.
Pobre perro, entiendo por qué está tan frustrado. Debe ser muy duro convivir con Finn.
