Calaveritas literarias

El canto de Leo

Estaba Leo cantando en el panteón.

Canciones de adoloridos 

según el para los difuntos.

Cuando de pronto una tumba se abrió

y de ella la calaca emergió.

- Mijo, cantas muy feo

- te lo digo sin cotorreo.

Fue lo que la parca le dijo

Leo muy enfadado comenzó a cantar más fuerte

para ahuyentar a la muerte.

Ésta muy enfadada

le habló a su difunto padre

para que viniera a callarle.

Carlos muy enojado estaba

pues de su sueño bien no despertaba.

Junto a la huesuda se sentó

y de la nada un grito pegó.

Al canto de Leo se unió.

La calandraca como él le decía

muy furiosa parecía.

De tanto enojo acumulado

todo se volvió helado.

Las puertas del inframundo se abrieron

y ellos a lo profundo cayeron.

Sin dejar de cantar 

para al pingo molestar.