Calaveritas literarias

Gomelo

Estaba Gomelo
Sentado muy comodin
Ensima del cojín
De pronto llegó la calaca y le dijo
- ¿No deberías estar cuidando?
En vez de estar tirando polilla
Andale y vete a ladrar a la esquina

- Ay, déjame descandar
Toda la noche no pare de ladrar
Repeliendo a todas las almas
Que a mi casa querían entrar

Y correteando a esos chamaquitos
Que me avientan de palitos
Siempre me lastiman mi ozico
Y eso un día,
Casi me quedo bizco
Por sando golpe que me dieron
Y luego de la nada huyeron

- Ay pobre perrito
Ven te voy a sobae tu hociquito
La muerte muy conmovida le dio un fuerte abrazo
Y le solto el lazo del portón
- Ahora sí mi Gomelo,
Vete y espantalos sin recelo

Los niños groceros despavoridos corrieron
Y Gomelo divertido tras ellos
La muerte sentada observaba jovial
Porqué al fin, iban a respetar
A un animalito
Que era su igual
Era un ser vivo, al que tenían que respetar
El no puede hacer más que ladrar
Y ellos son los que se deberían de educar.