Estaba Gaelito
sentado como angelito
degustando de unos taquitos.
Cuando de pronto un portal se abrió
y de él la muerte salió.
Con ella su abuelo venía
lleno de alegría.
Pues a su nieto consentido
la calaca le había permitido visitar
antes de regresar.
Gaelito muy contento
a sentarse lo invitó.
Las risas no faltaron
con cada historia que su abuelo contó.
Pero el momento llegó
de a su sueño profundo volver.
La calaca le dijo que lo volvería a ver.
Mientras conservara su inocencia
y se armara de paciencia.
Gaelito en sus recuerdos lo guardo
y a su madrina le relato.
Añadiendo que había visto a la muerte
y que había sido amable
pues a su abuelo le permitió ver
en aquel día en que los muertos pueden volver.
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Calaveritas literarias
PuisiLes comparto una serie de rimas divertidas y nostálgicas referentes a la tradición mexicana del día de todos los Santos.