Nubes con forma de corazón

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Capítulo 15

Luke 

Zoé estaba conmigo después de todo, y yo había regresado a Estados Unidos por ella, claro tendría que volver a Londres en algún punto pero ahora solo podía pensar en que la tenía unas cuantas horas mas conmigo.

— ¿Qué ocurre Zoé? 

— Nada solo estoy indecisa

— ¿Por qué?

— Ya sabes, la universidad aún no se que carrera seguir, ambos sabemos que todo lo que tenga que ver con arte para mi es muy importante, me hace sentir conectada con ella.— dijo Zoé mientras se le quebraba la voz al referirse a su madre.— Papá no lo entendería, siento que el espera que yo siga sus pasos, pero yo soy todo lo contrario a el, el parece ser rutinario y yo no, sus movimientos son sumamente planeados y los míos, los míos... Son claramente improvisados pero totalmente firmes. Siempre me a gustado el Arte, el pintar, bailar, cantar, dibujar y por supuesto escribir, eso me encanta, aplique para Bellas Artes, Filología e Interpretación de dirección teatral. Pero... me han mandado las cartas universitarias y me han admitido en las tres carreras, y simplemente no quiero pensar solamente en mí porque me hace sentirme egoísta, pero entonces pienso que solo seré feliz cuando yo misma me haga feliz a mi y no a los demás...

— Exacto Zoé, solo cuando tu te hagas feliz a ti misma y no al resto del mundo lograrás ser feliz, pero si quieres mi opinión, bueno pues eres una excelente pintora, todos hemos visto los cuadros que has pintado para tu padre y en especial el de las zapatillas ballet ese es maravilloso, lo que me lleva a lo siguiente, tú, tal y como lo era tu mamá eres buena en todo lo que tenga que ver con la danza en especial el Ballet y cuando bailas eres solo tu y tus pies dejando volar tu imaginación, y  tu imaginación vaya Zoé es bastante grande porque tus historias son buenas, recuerdo que cuando tenias unos dieciséis años me enseñabas cada historia y libro que empezabas, aunque nunca supe por que las dejabas a medias cuando iban tan bien, en cualquiera de las tres brillaras, aprovecha tus oportunidades Zoé.

— Nunca las terminaba porque pensaba que no eran lo suficientemente buenas para que el mundo las viera, y me vieran a mi, porque tu sabes muy bien que yo era cada una de las palabras que escribía, y estaba tan rota que me daba miedo que el mundo me pudiese ver tan abierta y dañada, siempre me ha dado miedo la debilidad y sigue dándome miedo caer al vacío y que abajo haya piedras puntiagudas con las que me pueda hacer daño.

— Lo ves ahora ya no eres la misma niña que antes, ahora te veo mas entera y fuerte, lista para mostrarle al mundo cada una de tus historias.

— Tienes razón, me siento viva, después de que ella muriera yo no volví a ser la misma, ella hacía que creyera en mi misma cada mañana y me levantara para luchar por mis sueños y alcanzarlos y ahora... Ahora me toca repetírmelo a mi misma cada mañana.

— Yo confío en ti Zoé y he visto como has luchado por tus sueños siempre, así que elige la carrera que te haga sentir más segura de ti misma.

Nos recostamos en la parte de atrás de la camioneta con un a manta para ver las nubes, y buscarles una forma como había visto hace muchos años atrás a la madre de Zoé para que ella se relajara. Con ella las nubes no tenían forma, porque entonces tomaban vida propia y eran lo que realmente querían ser, abstractas y libres.

— Zoé ¿Cuál es tu palabra favorita?

— Libertad...— dijo acompañado de un suspiro.— ¿Y la tuya?

— La mía no lo sé, nunca me lo había preguntado.

—¿Y qué te hizo preguntármelo a mi?— dijo colocando su cabeza sobre mi brazo.

— Te lo pregunte porque tu eres así...

Así  ¿así cómo?

— Impredecible y con una imaginación asombrosa, vives el momento con todos tus sentimientos, sin ningún tipo de freno. Solo... sientes.

Pasamos toda la tarde juntos, viendo nubes hasta que llegó el atardecer y entramos de nuevo a la cabaña.

— Zoé...¿traes abrigo?

— No...

— subiré por algo para que te tapes. 

Subí hasta la que era mi habitación en la cabaña y tomé algo para Zoé.

Cuando regresé ella se había quedado dormida en en sofá y al verla me sentí como un niño que esta a punto de abrir sus regalos de navidad y es que ella era todo realmente, era como la mezcla de todo lo que un día yo empecé a buscar siendo un adolescente y termine encontrándolo en Zoé muchos años después de que empezara lo nuestro.

Ese mismo día en la noche nos despedimos porque yo tenía que volver a Londres, pero seguramente cada vez que me veía con Zoé me encontraba más feliz, porque con tan solo una sonrisa  ella irradiaba una energía que todos necesitábamos.  


Instagram: @escrideam


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