Quiero que seas tu

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Capitulo 1

Zoe

No tenía ni la más mínima idea de lo que iba a pasar con mi vida, siempre creí que mi vida no tenía nada diferente a las vidas de mis amigos y quizás todo era un completo error, nunca sabes lo que puede pasarte a ti o tus seres queridos pero todo eso no me importaba porque yo quería que fuera el, el chico de los ojos verdes y pelo despeinado que siempre pasaba a recogerme al colegio y luego seguía su rumbo después de dejarme en casa, quizás el nunca se fijaría en mi y ese no era solo un capricho sabía que yo sentía algo verdadero por el, por Luke.

Conocí a Luke cuando tenía 12 años y el 18, un día mi madre se acercó a mi y me dijo que sería él el que se encargaría de llevarme y traerme a casa después del colegio puesto que nuestro chófer se había jubilado, extrañaría mucho a Joe, el siempre sabía lo que me pasaba y me tenía un cariño muy fuerte, el siempre había estado en cada día del padre escolar, al que mi verdadero padre nunca podía ir porque estaba trabajando en otro país muy lejos de mi. Joe era a la única persona en la que confiaría para contarle algo, a pesar de su edad y de ser un hombre 50 años mayor que yo era como mi mejor amigo, el abuelo podía parecerse a él, pero nunca sería tan divertido y comprensivo como Joe, lloré mucho ese día y empecé a odiar a Luke era un idiota que creía que me compraría con dulces, pero yo también habría tratado de hacerlo si una niña de 12 años me hacía la vida imposible aún cuando no estaba en horas laborales, nunca hice algo tan malo, solo me escabullí en su habitación y dejé un ratón inofensivo entre sus cajones.

Las habitaciones de servicio estaban al otro lado de la cocina y solo se me permitía ir allí por dos razones, la primera para ir con Lucy nuestra ama de llaves que era como una madre para mí, ella se encargaba de vestirme, arreglar mi uniforme y hacerme la lonchera y la segunda para ir a la lavandería, por alguna extraña razón me gustaba estar en la lavandería y ayudar a Lucy a doblar toda la ropa. Pero después de esas dos razones tenía terminantemente prohibido ir, se me hacía estúpido, no es como si me interesara ir a platicar con los metrés que toda mi vida habían trabajado para el señor Fox, mi amado padre, él nunca estaba en casa siempre tenía viajes importantes a los que ir y en ocasiones cuando estaba de vacaciones nos llevaba a mamá y a mí, pero las cosas habían cambiado desde que mamá falleció en un accidente, papá ya no era el mismo y siempre me decía lo mismo.

- Zoe ya te lo dije, nadie puede cuidarte mientras yo estoy en reuniones, mejor quédate en la ciudad y sal con tus amigos diviértete eres muy joven cariño.

Odiaba eso, siempre era la misma historia, me tenía como en una vitrina, en una mansión de cristal, era hermosa no lo niego, mamá se encargó de decorar cada rincón, pero mi lugar favorito era nuestra biblioteca, era inmensa llena de misterios, de pasión, de todo tipo de libros maravillosos, en los que yo me perdía durante horas, pero por las vacaciones yo prefería perderme en el resto de la finca, era hermosa llena de árboles y un riachuelo que me encantaba, al final conectaba a la orilla de la playa, pero si mirabas la casa de frente solo parecía una simple mansión como cualquier otra.

Lucy siempre me decía que yo le había regalado dos chispas de chocolate a mi mamá, refiriéndose a mis ojos, y que tenía hilitos de oro en el cabello, ella siempre me cuido y se aseguró de que yo estuviera bien después de lo que pasó con mamá, siempre sentí que la servidumbre de mi casa era más mi familia que los que se hacían llamar mi familia eso nunca les parecería bien, pero yo siempre insistía en comer en la cocina con ellos, era muy incómodo comer sola en una mesa enorme, ya todos se habían acostumbrado a mi presencia no autorizada en ese lado de la casa, incluso ya había logrado que la mayoría me dijeran Zoe y no señorita Fox, solo cuando papá llegaba fingíamos que nada de eso pasaba.

Todos menos Luke Williams, todos menos él pero claro, parecía una gran estupidez que quisiera tratarme con más amabilidad y menos respeto después de todo lo que había hecho antes, pero ni loca le iba a explicar que después de mi fiesta de cumpleaños número 15 me había dado cuenta de lo enamorada que estaba de el, bailamos el vals juntos después de que mi padre tuviera que ir de emergencia a una de sus empresas y solo él supiera bailar el vals.

Instagram:@escrideam


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