24 - Sentirse sucia.

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Narra Seol*.

Desperté de repente, me dolía todo el cuerpo, me sentía como si una manada de animales me hubiera pasado por ensima, el dolor era indescriptible, un extraño cosquilleo en mi cintura y espalda se me hizo raro, como dedos tocándome.

Caí en cuenta del porque de ese extraño cosquilleo y deseé como nunca volver a estar dormida, si es posible dormida para siempre...

Sin darme cuenta dí un respiro agitado y un sollozo pequeño e involuntario salió de mi.

— Seol, mi amor, has despertado —susurró con su mas que nunca asquerosa voz. No respondí solo empecé a respirar agitadamente sin poder evitarlo.— Amor, ya llevó casi una hora despierto, mi padre me marcó al teléfono diciendo que me necesitaba urgente en la casa, para unos negocios, pero decidí esperar hasta que despertaras, no podía irme así como si nada, después que de hicimos el amor.

No podía creer lo que él decía, se atrevía a decir que hicimos el amor después de que me obligó de la peor forma. Lo odiaba, lo odiaba mucho.

— Amor, te estoy hablando, no me hagas perder la paciencia —estaba de espaldas a él pero me giró con sus brazos haciéndome quedar de cara a el.

Al voltearme se dió cuenta de las lágrimas silenciosas que salían de mis ojos. Aunque yo no lo miraba a los ojos, era incapaz de hacerlo, solo podía quedarme callada y temblar, sin poder emitir palabra alguna.
El solo resopló con desespero.

— Mira Seol, ya deja las ridiculeces, eres una llorona —me tomó del mentón y me hizo mirarlo, eso solo provocó que se me inundasen más los ojos— Deja de llorar estúpida, las mujeres de verdad no lloran después de hacer el amor, madura por dios.

En estos momentos no quiero ser una mujer, no quiero madurar.

— Te estoy diciendo que si me ignoras me harías perder la paciencia ¿Entiendes? —puso uno de sus dedos en mi cabeza y me dió golpesitos con el.— ¡¿Entiendes?!

— S-si... —fue lo único que pude articular con mi voz quebrada y fue casi inaudible. Lo escuché suspirar.

— Perdón amor, ya te he dicho que no me gusta tratarte mal, pero vez como tú eres la que me provoca. —dijo y me pegó a su pecho mientras acariciaba mi cabello, puse mis manos de escudo para no tenerlo tan cerca pero fue inútil. — Amor, como te mencioné, mi padre me llamó hace ya un rato, debo irme terroncito y eso me pone muy triste, me hubiera gustado pasar contigo todo este día. Si no voy mi padre en verdad va a matarme y no queremos eso verdad.

Yo si, quiero que te mueras, que te mueras y no vuelvas a tocarme nunca más, a mirarme, que te larges a otro país o hacerlo yo pero ya no verte nunca más, quiero que me dejes en paz.

Claro que solo podía responder eso en mi cabeza porque la cobardía jamás de dejaría decirle algo así en realidad.

El se paró porfin de la cama dejando de abrazarme. Yo jale las cobijas más a mi dirección y las apreté en mis puños, me pegué más al respaldo de la cama y cerré los ojos para no tener que verlo poniéndose la ropa.
Abrí con tranquilidad mis ojos hasta que pude escuchar el cierre de un pantalón subir.

— Trataré de venir a verte hoy mismo amor, aunque sinceramente no sé si pueda, siempre que mi padre me llama como lo hizo hoy es por algo importante que siempre se lleva algo de tiempo, pero te prometo que vendré tan pronto como me sea posible, para no dejarte sola —yo solo miraba mis pies, pero noté como se acercaba de nuevo a mi, me hize para atrás por instinto pero no sé detuvo, subió gateando a la cama y me quiso besar, gire mi cara para que no lo hiciera pero me tomó de las mejillas bruzacamente y unió nuestros labios, lo ví sonreír. — Te amo —dijo y finalmente salió del cuarto.

Esperé solo un momento para poder escuchar la puerta de la casa ser cerrada, haciéndome saber que al fin el mounstro se había ido.

Tomé la gran almohada que estaba a un lado mío, la abracé y enterré mi cara en ella. Grité, esperando que la almohada pudiera suavizar el gran grito que había dado, mientras seguía gritando golpeaba el colchón a puño cerrado y apretaba las sábanas.

— ¡¿POR QUÉ A M?! ¿POR QUÉ A MI!? — grité ahora sin la almohada en mi cara, sin importarme la magnitud del sonido y a quien le pudiera llegar.— ¡ME QUIERO MORIR!¡ME QUIERO MORIR! —me abracé a mi misma y me dejé caer rendida en la cama— ¡¿Que hice, que fue lo que hice?! ¿Por qué me tuvo que pasar esto a mi? ¡YO NO QUERÍA! ¡YO NO QUERÍA! ¡Yo no quería!... — sollozé hasta quedar sin aliento.

Limpié las lágrimas de mi cara, la almohada también estaba llena de lágrimas al igual que la sábana. Me levanté de la cama con las cobijas aún enrolladas en mi cuerpo, ignorando todo el dolor tanto mental como físico, pero apenas puse un pie en el suelo un chillido fino salió de mi, no podía, mis piernas me temblaban, no podía caminar y lo peor era el horrible dolor en mi vientre.

Me apoyé en la madera de la cama para sostenerme y fui lentamente con el objetivo de llegar al baño.
Cuando porfin estaba dentro del baño frente a la ducha dejé caer las sábanas al piso, sentí mucho frío al estar descubierta.

Abrí la llave del agua al máximo y dejé que todo el trabajo se hiciera solo, que el agua mojara todo mi sucio cuerpo y comenzando a restregar el jabón contra mi.

— N-no por favor... —comencé a recordar sin querer todo lo sucedido en la noche anterior.— ¡No por favor! ¡No! —chillé y entonces caí en cuenta, que esta vez ni el agua podría llevarse toda la suciedad que sentía en el cuerpo, sin importar cuánto jabón pasara, que tanto tallara, lo que siento ahora sería algo que definitivamente no se quitaría con ningún remedio.

Lo que siento ahora no es tan simple como solo dejarlo pasar, no es tan fácil como simplemente cubrirlo con pomadas y maquillaje, lo que siento ahora no era algo físico que pasaría con el tiempo, era diferente, era ahora algo mental que sé que no importa que haga, no lo podré eliminar.
Lo que siento ahora era querer estar muerta.

— ¡Déjame, p-por favor! ¡Te lo ruego! ¡T-te lo ruego!... —me deslicé por la pared hasta acabar en el piso, abrazada a mis rodillas queriendo desaparecer para siempre.

Me sentía tan sucia, tan sin escencia, como si fuera la persona más miserable sobre la tierra. Mi vida ahora estaba arruinada.

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⏰ Última actualización: Apr 03, 2021 ⏰

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Dolor -Jungkook-.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora