2🖤6: Mañana en la noche.

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Frank Morrison utilizó su frenesí para ir tras los sobrevivientes que intentaban escaparse de su inevitable ataque. Danny Johnson se escondía detrás de los árboles mientras miraba en los costados generando la vulnerabilidad de las víctimas.

Cheryl obtuvo la herida profunda y Ace estaba en el suelo soltando algunos quejidos mientras intentaba ignorar su agonía con los violines que resonaban en el fondo.

Quentin ansiaba curar al Argentino pero le era imposible si tenía a Ghostface en el fondo sigiloso con el intento de derribarlo de una.

Felix en el suelo intentando levantarse pero no lograría ser inquebrantable si no tenía las fuerzas suficientes para levantarse por sí solo.

Finalmente Felix Richter lo recordó.

"Seguro que duele un montón, pero de esta no la palmas, así que levanta, soldado. ¡En marcha!".

Bill le había exclamado aquellas palabras cuando Felix se hallaba en un gancho o en esa vez en donde estaba abatido en el suelo.

Precisamente estaba en la misma circunstancia.

—Tú puedes, joder —. Susurró mientras poco a poco, sus manos se flexionaban y tomaban fuerza para posteriormente erguir su espalda con cuidado.

Ahora más que antes, en algún cofre debía encontrar un botiquín para curarse y proceder a buscar la trampilla ya que en Haddonfield, en ese momento, carecían de generadores.

Mientras tanto, Cheryl intentaba escaparse de Frank pero este fue más ágil y rápido debido a que su cuchillo se desplazó sobre la espalda de la rubia, generando una herida profunda que le hizo soltar un chillido.

—¿Qué fue eso? —. Cuestionó Jake a Michael mientras abrazaba fuertemente su cuello. Desafortunadamente había logrado escuchar un grito y no estaba seguro si provenía de la música.

—No lo sé, ¿Oíste algo extraño? —. El azabache asintió y Michael añadió —No le des importancia, seguramente son Danny, Philip y Frank jugando.

—¿Y cuando podremos jugar tú y yo? —. Michael se sonrojó violentamente y golpeó con delicadeza el hombro de Jake.

—Cuando quieras —. Jake chasqueó la lengua y recostó su mejilla en el pecho de Michael.

—¿En qué estábamos? ¿En qué sentías amor por mí?

—¿Por qué? ¿P-Por qué se te ocurre mencionar eso ahora? —. Nuevamente los nervios tomaron su cuerpo y las piernas del homicida comenzaron a flaquear, pero este, intentaba mantenerse firme a toda costa.

—¿No es lo que estábamos conversando? Eso quiere decir que me amas —. Jake alzó sus hombros divertido mientras admiraba los labios temblorosos del asesino intentando defenderse con un mínimo argumento sin sentido.

—Eso es cierto pero... —. El azabache le interrumpió.

—¿Qué haz dicho? —. Fingió no haber oído nada mientras soltaba la mano del hombro del homicida y la colocaba en el oído.

—¡Es cierto, joder!

—No era para que te enojes, Michael —. Jake rió en su oído y besó su mandíbula mientras se alejaba lentamente —Me encantó esta noche.

—A mí también. Nunca te lo había mencionado pero, t-te ves bien —. Michael siempre durante toda su vida fue honesto y más en aquél momento en donde las voces no estaban presentes gracias al menor.

—¡Tú más! Aunque el overol te quede espléndido, esto es lo más —. Comentó Jake mientras se dedicaba a tocar el pecho de Michael, acariciando su hombro y luego su brazo hasta posteriormente llegar a su mano.

El Alma De Un Asesino → Michael Myers x Jake Park ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora