No mas callado [TK]

Capitulo 33

Jungkook estaba sentado en una camilla mientras una enfermera le vendaba la mano. Taehyung estaba a su lado y el señor Kim se encontraba fuera del lugar esperando.

—Por suerte el veneno de la serpiente no llegó a mas zonas—dijo la enfermera—Si llegaba más tarde, el veneno podría haberse esparcido y le tendríamos que haber cortado la mano por su seguridad.

El castaño tragó saliva y asintió con la cabeza, de pronto vio a su madre entrar dando un portazo y acercarse a el preocupada.

—¡H-hijo! ¿¡Que t-te ocurrió!?—preguntó y tomó su mano—Oh b-bebé ¿Te duele mucho?

—No... no te preocupes. Solo voy a estar vendado unas semanas.

La señora Jeon suspiró aliviada y abrazó a su hijo. La enfermera dejó las cosas en su lugar y salió de la habitación. Jungkook miró su mano y sonrió.

—Estoy muy seguro de que Antonia me mordió para pasarme sus poderes de serpiente—dijo contento y miró a Taehyung—Ya saben, como la araña esa que le dio poderes a Spiderman con una mordida.

—Jungkook~ Esto no es una pelicula~

—Lo sé... por eso descarté la idea

La habitación quedó en silencio, Jungkook alzó las cejas confundido al ver que su madre estaba de brazos cruzados.

—¿Y tu que hacías con una serpiente, eh? Sabes que son peligrosas.

—Uuuffffff, larga historia—respondió Kook—En fin, debo agradecerle al padre de Tae por traerme al hospital, sino fuera por el ahora mismo me estarían cortando la mano

El señor Kim entró a la habitación, se acercó a ellos y miró la mano de Jungkook.

—¿Como está tu mano?

—Bien, muchas gracias por traerme al hospital

—Te lo debía... ya sabes—el señor Kim suspiró—Por hacer darme cuenta que estaba siendo injusto con mi hijo.

Taehyung sonrió, era tan lindo ver a su novio y a su padre llevándose bien. Jungkook también estaba aliviado.

—¡Papá! ¿Podemos invitar a Jungkook y a su madre a cenar hoy en casa?

La sonrisa de Jungkook se borró rápidamente.

Todo estaba yendo tan bien, tenía miedo de que su madre meta la pata y termine discutiendo con los padres de Taehyung.

—Oh, claro que si—respondió el señor Kim y miró a la mujer—¿Que dice usted? ¿Pueden venir a cenar esta noche?

—Ay, que atentos son~ Claro que podemos ¿O no, Kookie?

Todos miraron a Jungkook, este pretendía que prestaba atención pero por dentro, los muñequitos de su mente estaban corriendo por todas partes.

—¡Alerta roja! ¡Alerta roja!

—¿¡Que le decimos!?

—¡Solo sonrían, es la respuesta más decente!

Jungkook fingió una sonrisa asintiendo, Taehyung también sonrió y besó su mejilla con emoción.

—¡Genial! Solo debemos esperar a que la enfermera nos diga que hacer y vayamos.

Después de unos minutos, la enfermera entró a la habitación y les hizo llenar unos papeles a la señora Jeon por ser la madre del paciente. Le dieron unas recomendaciones como no mover tanto su mano y por supuesto... no hacerse amigo de una serpiente otra vez.

A pensas salieron del hospital, la señora Jeon se acercó al señor Kim.

—Antes de ir, Jungkook y yo iremos a casa a preparar unas cosas. ¿Luego nos vemos?

—Por supuesto, nos vemos luego.

Taehyung aprovechó que los dos mayores no los estaban viendo y besó los labios de Jungkook. Este sonrió y entrelazó sus manos.

—Koo... gracias por hablar con mi padre

—Ah, no es nada. Por lo menos todo está bien ahora.

Los dos se sonrieron y se besaron por última vez para luego despedirse. Cada familia entró a su respectivo auto y se alejaron del hospital.

La señora Jeon manejaba el auto mientras que Jungkook miraba en silencio por la ventanilla pensando en algunas cosas. El año del instituto estaba por terminar y pronto iría a la universidad. No tenía idea de que podría hacer luego.

Todos los días siempre cambiaba de idea, estudiar teatro, ser compositor, ciencia, modelo de revistas, escritor y cientos de trabajos que todo el tiempo de la ocurrían pero no terminaba de decidirse. Quería estudiar algo interesante, quería hacer que su vida valga la pena.

—¿En que piensas, hijo?

—Pienso en... mi futuro. En que no tengo nada que hacer, solo tengo... a Tae

—Oh bueno, tal vez tu futuro sea estar con Taehyung.

El menor rió y mordió su labio mirando su mano vendada, pensar en Taehyung era lo más bonito. Tenerlo era un gran regalo que no iba a desperdiciar, estaba muy enamorado.

Y si su futuro era estar con Taehyung como su madre se lo dijo, ese futuro le encantaba.

Continuará.