Տ ᗴ ᑕ ᖇ ᗴ T Տ • ᕼ K.

36¹| Miedo.

Miedo. 

(****)

El corazón poco a poco se iba saliendo de mi caja torácica. Es un poco difícil entrenar durante tanto tiempo sin descansos. Sobre todo cuando no recuerdas muy bien cómo hacerlo.

Esta vida me va muy bien. Al principio no me gustaba nada porque era solamente un distractor, tenía miedo de hacer ese tipo de cosas como despertar cada semana sin saber qué pasó, pero la realidad es que amo todo lo que tenga que ver con ni recordar nada y dejar de sufrir.

Es como un suicidio no planeado y además selectivo. No tengo que preocuparme por el día a día y eso solo me saca un peso de encima. No puedo creer que algún día terminaría diciendo esto, pero me gusta esta nueva vida.

Una vida en dónde, afortunadamente, no tengo que despertar cada mañana deseando morir y dormir cada día deseando no despertar. Afortunadamente, siempre que de alguna forma me aburro de lo que es mi día a día y de mi triste corazón puedo descansar en la paz de una oscuridad sobria que me mantiene en calma y tranquilidad.

Nunca pensé llegar a un punto en dónde algo tan enfermo como esto llegaría a gustarme. Pero, sinceramente, ¿qué espero de mi misma?

Esta es la primera vez que despierto en meses. Mis muñecas rojas arden y duelen por lo dañadas que están al igual que mis tobillos, sin embargo, aún recuerdo el ardor típico de las cortadas, por lo que puedo pelear y entrenar fácilmente con algo como esto encima.

Me duele mucho la cabeza, Suru y Hyouka-san dicen que es porque lloré hasta quedarme dormida. O bueno, Walker lloró hasta no poder más. Nunca me imaginé a Walker llorando.

Aunque tal vez es por las nuevas cicatrices que tenemos. Hay una larga cicatriz en mi cadera y parece que fue bastante profunda en su momento. Ahora no es más que una irregularidad en mi piel. Creo que fueron siete meses sin despertar. Mi cabello ha cambiado tanto, está más largo.

A Hiruda le gusta el cabello largo, muy largo, sin embargo, hemos llegado a una tregua porque ni a Walker ni a mí nos parece lindo el distractor del cabello en nuestra cara. Creo que ha sido algo de Walker más que mío, ella aparece más que yo y, sinceramente, tiene más voto que yo.

Para Hiruda no existo.

Walker me ha dicho que es porque está celosa de que he tenido una vida y recuerdo de nuestros padres aún cuando era pequeña. Pero ella no sabe lo doloroso que es recordar eso y saber la forma en la cual terminaron.

Estoy pensando demasiado, creo que ha llegado la hora de desconectarme de nuevo.

—Hiruda Usui —ese hombre de lengua larga me mira con notable diversión.

Esta vez no sé por qué. Pero lo odio, lo odio, lo odio mucho.

Y también al niño que va junto a él todo el tiempo, aunque me gusta mucho su cabello y sus gafas son bonitas.

Decidí no responder. Estoy segura de que él sabe que no soy Hiruda pero se empeña por llamarme de esta forma cuando quiere. Después de todo a ella no le cae mal este tipo, lo respeta mucho sobretodo por lo que le ha enseñado.

La única cosa que me gusta de lo que he aprendido es el Byakugou y solo porque es lindo el rombo en mi frente.

Ahora tampoco quiero bailar.

—Te informamos que debías estar lista para la hora, ¿Qué es lo que te pasa?

Arrugué los labios. Sinceramente no entendía de qué me estaban hablando, pero supongo que debo fingir que sí para no salir herida.