Capítulo 2

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Ya se había hecho de noche, y Clarke volvió a casa con Madi y Gaia. 
Raven, Emori y Murphy iban riendo por delante. 
Bellamy miró a Clarke en su propio silencio, como si estuvieran en una burbuja y ellos pudieran sentirlo. El viento movía las hojas de los árboles y se sentía un minúsculo rocío que les mojaba la ropa. 
Ella le devolvió la mirada, y él pudo notar que había esperado mucho para poder expresar en su rostro lo que sentía. 
Y la rubia sintió un alivio inmenso de la presión que predominaba cada vez más en su pecho.

—Raven. —Bellamy le dió una pausa a la situación, la morocha se giró con una sonrisa porque iba pasando un buen momento. Clarke fingió de nuevo una sonrisa en ese instante. —Preparanos la cena a nosotros también, ya los alcanzamos. —Raven lo miró cómplice y asintió.

Bellamy tomó su mano y empezó a caminar. Ella lo sujetó fuerte y se dió un respiro.

—Clarke, quiero que sepas algo. —Comenzó a decirle. Los ojos de la rubia brillaban en la noche. —Lo que decidas en cuanto a Russell, yo estaré de acuerdo. Estoy contigo, y no quiero que sientas culpa por esto. 
Bellamy se detuvo frente a ella sin soltar su mano.

—Tengo miedo de que sus seguidores lo tomen como un acto de guerra. No quiero que muera más nadie. —Clarke bajó la cabeza. —Estoy cansada de que la responsabilidad recaiga en mí, y tener que decidir quién vive y quién muere, mientras sacrifico a las personas que amo, y luego todos me odian por ello.

—Haces lo que es necesario para que podamos sobrevivir, y creo que nadie puede verlo aún. Siempre nos protegiste y sufriste para que nosotros no tuviéramos que hacerlo. —Bellamy se acercó y levantó su mentón para poder ver su rostro. Lágrimas corrían por sus mejillas, y aún estaba conteniendo lo peor. —¿Recuerdas el día en que nos enviaron a buscar armas a un galpón abandonado, poco antes de que el Arca bajara a la Tierra?

Ella soltó una pequeña risa, de vez en cuando recordaba ese momento, porque fue un antes y un después en su amistad. Cuando Clarke se dio cuenta de que Bellamy no era lo que exteriorizaba, sino que estaba lleno de miedos y se sentía culpable por la muerte de su madre, y por las personas que murieron en el Arca. 
Asintió a la pregunta y él también sonrió, pensó que ella no le había dado tanta importancia a ese momento como él. 

—Ese día descubrí que veías esperanza en mí cuando yo no la veía, y que contigo puedo ser yo mismo. Fue la primera vez que lloré delante de alguien, y me alegra que hayas sido tú. —Lo abrazó y por fin pudo soltarlo todo. Bellamy la estrechó con fuerza y pudo sentir el dolor en su reprimido sollozo. —Hemos vivido nuestros peores momentos juntos, y siempre traté de estar ahí cuando tuvieras que tomar las decisiones más difíciles. También me arrepiento de mucho, y a veces no puedo dormir pensando que yo soy el problema. 

Ella sentía que después de muchísimo tiempo, todo se mantenía igual entre ellos. 
La última vez que habían tenido una conversación, Bellamy la perdonó por poner su vida en peligro para salvar a Madi. Él siempre la perdonaba, siempre la protegió de la culpa que él sentía cada día.

—Tu no eres ningún problema. —Ella levantó la vista sin importarle sus lágrimas y a penas pudo hablar, el labio inferior le temblaba y la barbilla también por intentar frenarlo. —Sin tí no estaríamos aquí.

—Sin tí tampoco. Te aseguro que yo no podría sin tu ayuda. —Ambos se rieron por lo bajo y se quedaron viéndose. 

—Gracias. —Clarke intentó formar una sonrisa a pesar del poco control que tenía de su rostro, y Bellamy secó sus lágrimas con la manga de su pullover. 

—Vamos, seguro nos están esperando. —Él tiró de su mano y empezaron a caminar empujándose el uno al otro como dos niños por un par de metros. A poco de llegar a la casa volvieron a recuperar la mesura.

Do Better (Bellarke)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora