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Y ahí estaba de nuevo, la escena se estaba repitiendo, sus piernas ardían de tanto correr, se sentía mareado. Eran las mismas condiciones, solo que esta ocasión no se aseguraba que Vegetta llegaría a salvarlo.

Sintió el golpe en su cabeza cuando cayó al césped, acorralado por aquel alfa de olor salado que lo había atormentado anteriormente. Observó aquellos filosos colmillos mientras todo se volvió oscuro.

Vegetta no estaba seguro de si Rubius lo sabia o no, pero su oso no paraba de llorar, llamándole, buscando a su alfa. Así que no fue sorpresa que para el momento en que Fargan y Alex habían alcanzado al hibrido de oso, el alfa de ojos morados tuviera acorralado al otro alfa que se había atrevido a lastimar a su omega.

- ¡Alto policía!- gritó Fargan, sabia que si no intervenía en ese momento, Vegetta mataría a aquel con facilidad en cuestión de minutos.

- Yo le advertí - el alfa sin duda explotaría de ira - Que si se atrevía tocar a mi omega lo mataría - Fargan se percató en ese momento que no era su amigo quien hablaba, sino su animal interior, eso nublaba su mente.

- ¡Vegetta! - el grito de Alex llamó la atención de los héroes - ¡Debemos llevar a Rubius con Auron! - este, aun con la pequeña Leia en brazos, se encontraba al lado del omega inconsciente -¡Podría estar herido! -.

Aquellas palabras fueron lo que trajeron al líder de los héroes a la realidad, no sin antes proporcionarle otro puñetazo al hombre para dejarlo inconsciente, se levantó para correr a auxiliar a Rubius, lo tomó entre sus brazos con sumo cuidado.

— ¿Fargan? — preguntó Alex

— Ve con ellos, yo me encargo de este y en un momento los alcanzaré —Alex asintió mientras salía corriendo detrás de Vegetta.

🌸

Alex estaba nervioso y Vegetta asustado, era un alfa claro, pero su mayor miedo era perder a su omega, la persona que más amaba en el mundo.

Necesitaba que Auron saliera ya de la habitación donde tenían a su pareja, estaba demasiado nervioso, no entendía de que hablaban.

— A parte del golpe que te diste en la cabeza, todo esta bien, Calvo — Rubius suspiro aliviado, hacia unos minutos que había despertado y tenía una pequeña venda en su cabeza.

— ¿Entonces puedo irme ya? Vegetta debe estar preocupado, lo estoy sintiendo —

— Esa es la otra parte, como protocolo me encargué de hacerte una prueba de sangre, gracias a esa prueba necesito hacerte otro par de estudios —.

Vegetta observaba por el cristal como el beta y Rubius platicaban, el castaño asintió mientras observaba cómo el doctor caminaba hacia la puerta.

— ¿Cómo está Rubius? — Fargan llegó corriendo hacia ellos, acercándose instintivamente a Alex y a la pequeña. Haciendo un ademán para que pudiera cargarla.

— Aún no lo sabemos— respondió Alex, en ese momento Auron abrió la puerta, mostrándose profesional como lo indicaba su trabajo.

— ¿Cómo está él? — preguntó Vegetta preocupado.

— Quiere verte, necesitan hablar — el alfa asintió entrando a la habitación.

— ¿Él está bien, Auron? — preguntó Alex.

— Por supuesto — respondió con una sonrisa — Solo observen — la mirada de los 3 se dirigió hacia el cristal que los separaban de la habitación.

Vegetta caminó nervioso y aliviado hacia la cama donde reposaba el castaño, el cual sonrió al verle sentarse al lado de sus piernas.

— Me alegre que estés bien, Chiqui — tomó sus manos para depositar un suave beso en ellas.

— Auron dice que deben hacerme un par de pruebas más —

— ¿Qué? — Vegetta estaba confundido — ¿Por qué? ¿Te ha hecho algo ese alfa? — rápidamente se acercó a su rostro, pasando sus manos por su cuello y hombros, buscando alguna herida.

— Tranquilo, Vege — intentó tranquilizar el omega — Estoy bien, solo que Auron me dijo algo — sonrió tímidamente.

— ¿Qué te dijo? — preguntó preocupado.

Rubius, quien aún poseía aquella sonrisa enorme en su rostro, tomó la muñeca de su alfa con cuidado, mientras la dirigía hacia su vientre, haciendo que reposara toda su mano en el.

Una expresión de sorpresa invadió los rostros de Alex y Fargan. Era algo sencillo pero claro.

— Doblas — una sonrisa comenzó a crecer en el rostro de Vegetta — ¿Estás... — estaba emocionado — en cinta? —.

Alex observó con ternura cómo Rubius asentía felizmente mientras la pareja se unía en un abrazo.

— Llamaré a Luzu para contarle — Auron se alejó.

— Más tarde le contaré a Willy — Fargan estaba emocionado, sin duda, tenía envidia de aquel sentimiento que tenían Rubius y Vegetta en ese momento.

— Estoy tan feliz por ellos — murmuró el omega.

— Si, Alex, yo también— Fargan suspiró— Yo también—.

🌸

-Ubicación: desconocida
-Hora: desconocida
-Dia: desconocido
-Distancia de Karmaland: desconocida

Estaban asombrados.

Nunca antes habían visualizado una luz como esa en el cielo.

— Debemos investigar —

— Seamos cuidadosos —

Observaron cómo aquella luz sobre el lago se transformaba en un portal rojizo, ambos sujetaron con fuerza sus espadas.

Pudieron ver cómo algo salía del portal y caía directo al agua del lago, era una persona.

El alfa nadó hacia donde se encontraba aquel chico, mientras él omega corría a su hogar.

Lo tomó del brazo para llevarlo a la orilla.

—¿Amigo? — preguntó el alfa — ¿Estás bien? —

El moreno se quejó un poco, observando un poco su alrededor — ¿Estoy en Karmaland? — preguntó mientras sobaba un poco su cabeza.

— Me temo que estás bastante lejos— respondió apenado.

— ¿Qué? Oh no ¡Debo volver a Karmaland! — exclamó mientras trababa de levantarse — ¡Mi familia me necesita! —.

— Tranquilo, amigo — dijo el alfa — Podemos ayudarte, pero vayamos por partes. Necesitas descansar, estás muy herido—.

— Está bien — asintió apoyándose en el alfa para caminar

— ¿Cuál es tu nombre? — preguntó.

— Frank. Mi nombre es Frank—.

☘Ghostin☘ Karmaland 4Donde viven las historias. Descúbrelo ahora