Touch [ CS ]

XXII

Finalmente era lunes, debían ir a la escuela, y Kyungsoo mentiría si dijera que no estaba ansioso por regresar.

Chanyeol había ido al día anterior a casa de sus padres para recojer algunas de sus cosas, acompañado, por supuesto, de Baekhyun. Éste tuvo inmensas ganas de reclamarle a los señores Park lo que habían hecho, sin embargo, sabía que no le correspondía y que, a pesar de todo, debía ser respetuoso con ellos, por lo que solamente los saludó y se despidió de ellos con educación. Ya hablaría con su madre al respecto para que ella intentara hacerlos entrar en razón de alguna u otra forma.

—Buenos días —saludó Kyungsoo con una sonrisa tímida entrando a la, ahora, habitación de Chanyeol.

—Hola, Soo-ah —saludó sonriendo—. ¿Estás listo?

—Sí. Mamá tuvo que ir a trabajar temprano, pero me ha dicho que podemos desayunar lo que gustemos, ¿tienes hambre? puedo cocinarte algo antes de irnos, aún es temprano.

—¿Tú ya desayunaste?

—No, no tengo mucha hambre —admitió apenado y Chanyeol abultó los labios, tomó la mano de Kyungsoo y se encaminó a la cocina.

—¿Puedo hurgar en tu nevera?

—¿Preguntarás eso cada vez que quieras comer algo? —preguntó Kyungsoo, sonriendo con diversión y ternura.

—Lo siento, es sólo que no quiero parecer un confianzudo. Aún me da algo de vergüenza pensar que estoy viviendo aquí gratis.

—Mamá no tiene problema en lo absoluto. Te quiere mucho.

—¿Y tú? —preguntó alzando una ceja con leve picardía.

—Sabes que sí —dijo sonrojado, agachando la cabeza avergonzado, y Chanyeol sonrió enormemente al obtener la respuesta deseada—. Ya dime si quieres comer algo, lo prepararé rápido —intentó cambiar el tema, aún con un leve sonrojo en sus mejillas.

—No, está bien. Sólo comamos un poco de fruta con yogurt y será suficiente —dijo sacando el pote de yogurt natural junto con un par de manzanas y mangos de la nevera.

—Pero yo no... —Chanyeol le interrumpió.

—¿Piensas que permitiré que te vayas sin desayunar? Porque, de ser así, te equivocas mucho —dijo sonriendo suavemente mientras se dedicaba a cortar la fruta fina y cuidadosamente.

Kyungsoo no alegó más y solo esperó a que Chanyeol terminase, pues ni siquiera había aceptado su ayuda cuando de la ofreció.

Desayunaron en menos de treinta minutos, subieron a terminar de prepararse, y Jongdae pasó por ellos para que los tres, junto con Baekhyun fueran juntos a la escuela.

A la hora del receso, Chanyeol y Kyungsoo se encontraban en la azotea. Ya habían arreglado los malentendidos, sin embargo, todavía se sentía algo de tensión por parte de Jongdae, por lo que decidieron pasar un tiempo del receso separados, estando cada uno con su pareja.

—¿Sabes? he estado pensando que... que tal vez debería empezar a recibir algo de ayuda psicológica... —habló Kyungsoo con la mirada baja, acariciando el dorso de la mano de Chanyeol que estaba entrelazada con una de las suyas.

—¿Uh? ¿qué te hizo llegar a esa conclusión? —preguntó con curiosidad y Kyungsoo suspiró.

—Bueno... yo... realmente quiero poder abrazarte pronto sin sentir ninguna clase de miedo. Que podamos salir a citas, tomarnos de las manos todo el tiempo y poder besarnos tanto como deseemos —dijo cabizbajo—. Sé... que ustedes dicen que soy normal, y... tal vez no sea tan diferente a ustedes como yo me siento, pero... ver... a gente a mi alrededor, a Dae y a Baek, siendo siempre tan cariñosos, abrazándose todo el tiempo, besándose, acariciándose el cabello, es... muy doloroso para mí, y más aún sabiendo que también es una tortura para tí...

—¿Sabes? te preocupas mucho por cosas pequeñas, Soo-ah —dijo sonriendo con dulzura—. Si es algo que realmente quieres, sabes que tienes todo mi apoyo, pero... no quiero saber que lo estás haciendo por mí.

—¿P-por qué?

—Porque no me gusta pensar que quieres cambiar algo por complacerme, bebé, ¿puedo llamarte así? —preguntó con timidez y aclaró la garganta antes de que el menor contestara—. Quiero que, si deseas cambiar algo, sea por tí y no por alguien más.

—P-pero yo... bueno, de alguna u otra forma te veo como una motivación —dijo sonrojado y Chanyeol sonrió—. Uh, y s-sí puedes llamarme así.

—Una cosa, bebé —dijo haciendo énfasis en esa palabra—, es que sea tu motivación, y otra es que quieras hacer algo por complacerme. Mira, si quieres recibir ayuda especial para superar tu miedo, hazlo porque sabes que te hará feliz en muchos aspectos, por ejemplo, pero no porque piensas que, de esa forma, alguien más va a estar feliz a pesar de que tú vayas a sufrir en el proceso. No me malentiendas, me halaga y conmueve que quieras hacerlo por mí, pero me gustaría que pensaras más en tí, aunque fuese por una vez. Busca tu felicidad, Soo-ah, mientras no le hagas daño a alguien más de esa forma, siempre será bueno que pienses en tí como tu prioridad.

—Quiero besarte —susurró Kyungsoo sonrojado, mirando sus labios con intensidad, y él rió suavemente, mordiendo suavemente su labio inferior—. ¡No hagas eso! —se quejó, cruzándose de brazos mientras abultaba sus labios y miraba a otra parte, provocando que el alto largara una carcajada.

—Eres tan lindo, cuidado, que superas tu miedo y te como entero —bromeó sonriendo con un deje de picardía y Kyungsoo se sonrojó hasta las orejas.

—No sé por qué acepté ser tu novio, ¡ni siquiera sé por qué me gustas! ¡eres tan molesto! —se quejó y Chanyeol volvió a reír.

—Porque soy irresistible, bebé, ya lo sabes —dijo juguetonamente.

—Irresistible mi trasero —bufó.

—Sí, no lo niego —dijo encogiéndose de hombros, sonriendo con picardía.

—¿¡Insinúas que has mirado mi trasero!?

—¿Qué? ¿Tú no has mirado el mío? —preguntó alzando una ceja y Kyungsoo volvió a sonrojarse, provocando que Chanyeol volviera a reírse—. Pronto podrás tocarlo tanto como quisieras, bebé.

—¡Voy a matarte! —exclamó avergonzado.

—Ya me matas, con tu belleza.

—¡Ah! ¡Le diré a Dae que vuelva a golpearte! —dijo aún sonrojado y Chanyeol volvió a reír, esta vez suavemente, tomó la mano de Kyungsoo y dejó un suave y corto beso en ésta.

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Dije que eliminaría el aviso cuando tuviera, por lo menos, dos capítulos, y por esa razón, no iba a publicar este capítulo hasta que tuviera uno más, pero me estresaba mucho saber que les tenía esperando, así que se los publico ahora. ♡

Muchísimas gracias por ser tan pacientes conmigo y mostrarle tanto apoyo a mi trabajo, me siento inmensamente agradecida.

Les deseo un buen día (o noche, en su defecto), y les mando un abrazo enorme. ♡

—Sootiny.