POV Nico
Tener un león de Nemea y dos dracnae vigilándome no era para nada agradable, pero de alguna manera me subía el ego, me consideraban lo suficientemente peligroso para necesitar seguridad extra. Por lo que tenía entendido, solo solían poner a uno.
El león me caía bien, no había hablado como es normal con él, tampoco tenía intenciones, pero al saber que es el único León de Nemea en el barco me indicaba que había sido quien le arañó de arriba abajo la espalda a Thalia. Se merecía mi estima.
El barco hace tiempo que había establecido rumbo, esperaba que no fuese al Cáucaso, no estaban preparados para enfrentarse a esta endemoniada tripulación, ya me buscaría yo la vida para salir. Primero tenía que ver a Will.
Corrí tan rápido como las piernas me lo permitieron, la imagen de Luke Castellan me había aterrado. No por él, nunca tuve muy buena relación aunque me tratase bien, era indiferente para mi, pero de alguna manera no pude evitar compararlo con Will y el miedo de que terminase de la misma manera me invadió.
-¡Nico! - me gritó Jason.
Giré mi vista hacia él frenando el paso, iba al lado de Reyna ayudándola a caminar por el viento. La que podría considerar mi mejor amiga o mismamente mi hermana, llevaba a Thalia casi arrastras, seguía en shock y sin poder reaccionar por su propia cuenta.
<<Iré contigo, dame tiempo>> vocalizó Reyna o quizás gritó pero con el viento no podía escucharla.
Sonreí agradecido pero negué señalando a Thalia, aunque no me cayese bien, la necesitaba más que yo ahora. Jason trató de seguirme pero Reyna le paró comprendiendo que debía ir solo, aún así aceleró el paso gritándome que me seguiría.
Recibí un fuerte golpe cuando comencé de nuevo a correr, me llevé la mano a mi espada dispuesto a atacar pero me encontré con la mirada verde mar de Percy envuelta en lágrimas mientras me miraba.
-No me sigas - dije ayudándole a incorporarse con Annabeth en brazos. La apretaba contra él como si su alma se le fuese a separar del cuerpo.
Iba contrarreloj, no tenía plan y ya poco faltaría para que volviesen al Princesa Andromeda. Agradecí que tuviesen su barco en la orilla con una escalinata, tan prepotentes que ni les hace falta mantenerlo en mar abierto por si necesitan huir. Al contrario que nosotros.
La tabla de madera crujía a mi trote, desagradable y siniestro, me gustaba. No había estado aquí pero tenía un aspecto tan fúnebre que no estaba tan mal como me imaginaba, era más acogedor que el Perla.
-Dime dónde está Will Solace - exigí colocando la espalda en el cuello de una arpía que descansaba en cubierta espaldas a mi.
-Muerto - soltó una risa aguda antes de que se convirtiese en polvo cuando le corté el cuello.
Comencé a negar repetidamente, no podía ser, no era cierto. Mi vista se nublaba y el agarre en mi espada era cada vez más fuerte, aún así me negaba a creerlo, necesitaba verlo, comprobarlo por mi mismo.
Sin siquiera saber a dónde iba comencé a bajar por las escaleras viendo varios monstruos que comenzaban a alertarse de mi presencia, pero antes de que pudiesen reaccionar mi espada ya estaba cortándoles a la mitad. Todo lo que veía y escuchaba eran chillidos mezclados con polvo a mi alrededor, bajando cada vez más profundo, más oscuro.
-¡Will Solace! - le grité a una furia que soltó una baraja de cartas del susto y varios dracmas se le cayeron - ¡Responde! - ordené apoyando la punta de mi espada en su cuello.
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Lost at sea: Carnage
FanficCuatro meses después de tener en sus manos el talismán de las olas, la tripulación parece vivir en un continuo bucle del que, a pesar de sus ganas por comenzar juntos una nueva aventura. Desearán no haber comenzado jamás. Han pasado cuatro meses des...