15º Discusiones

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15º Discusiones

Tras aquella terrible tarde, Charles Bingley se distanció por completo de la señorita Bennet, a pesar de que ella intentaba mantener el mismo comportamiento que habían tenido antes de aquel beso, y todos fueron conscientes del cambio que se había operado en ellos.

Darcy, que conocía muy bien a su amigo y cuñado, se preocupó por el desánimo que vio en su rostro, y se extrañó de verlo huir de cada estancia en la que entraba Jane Bennet. Por ello, cuando estuvo a solas con su esposa, decidió preguntarle su opinión.

-¿No has notado algo extraño en alguno de nuestros invitados?- Preguntó sentándose con ella frente a la chimenea de su salón privado.

-¿Te refieres a Jane y al señor Bingley?

-¿Jane? ¿Tu hermana también se está comportando extraño?- Dijo extrañado.

-Desde hace un par de días el señor Bingley y ella están muy distantes, ella se sonroja y parece dolida cuando él desaparece al verla entrar en las estancias- Le comentó- Está claro que algo ha tenido que pasar entre ellos, pues estaba convencida de que ambos estaban interesados el uno en el otro.

-¿Qué? ¿Interesados? – Preguntó realmente sorprendido- ¿Lo dices en serio?

-Así es, desde el primer momento en que se vieron no dejaron de dedicarse miradas y han pasado mucho tiempo juntos, compartiendo pasatiempos.

-No me había dado cuenta.

-Creo que has sido el único- Dijo divertida- Eran muy evidentes.

-Bueno, no importa- Respondió, algo molesto por no haber sido tan observador, pues le gustaba controlar todo lo que sucedía en su casa- Lo que me preocupa es el motivo por el que de repente han cambiado su actitud.

-Mañana hablaré con Jane, a ver si puedo sonsacarle algo.

-Yo haré lo mismo con Charles- Suspiró con pesar.

-¿Ocurre algo?- Le preguntó al verlo apesadumbrado.

-No es nada.

-Si lo es, sino no tendrías el ceño fruncido- Tocó el asiento junto a ella en el sofá, indicándole que se pusiera a su vera- Cuéntamelo.

-Está bien- Dijo alzándose del sillón y sentándose junto a ella- No me gusta que haya problemas en estos momentos en los que deberías tener reposo y tranquilidad, y no quebraderos de cabeza- Colocó su mano sobre el vientre aun plano de su esposa- Quiero que descanses, que entre las nauseas y la casa, estás agotada.

-No te voy a negar que me siento muy cansada, pero te prometo que tras solucionar esta situación, descansaré y cogeré fuerzas.

-Está bien- Volvió a suspirar- Mañana por la noche volveremos a hablar del tema, a ver si hemos averiguado algo nuevo.

-De acuerdo- Dijo apoyándose en su hombro, intentando darle algo de calma y disfrutando de su cercanía. Él no dudó en envolverla entre sus brazos y disfrutar de su cariño, y tenerla de aquella manera le hizo sentir mejor.

A la maña siguiente, tal y como habían acordado, Elizabeth fue junto a su hermana a su salón privado mientras Georgiana les daba una lección de música a los niños. Y una vez se pusieron cómodas, fue directa al grano.

-¿Vas a contarme que ha sucedido entre el señor Bingley y tú?

-No sé de que me estás hablando- Dijo nerviosa, desviando la mirada.

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⏰ Última actualización: Nov 14, 2020 ⏰

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