Mi Loba © *En Edición*

4/Corre 🐾

● ¡Corre, Bella, Corre! Que el lobo feroz va por ti.

Rosalie regresó con sus hermanos, quienes la miraron con cierta decepción y reproche.

Sabían lo que significaba un vínculo de tal magnitud, y eran concientes que Rosalie también lo hacía. Y sin embargo, reaccionó de forma cruel.

Ella solo los ignoró, ya que estaba mirando lo que iba a hacer Zenda.

La pelinegra caminó a paso apurado hasta donde estaba Bella. Le tocó el hombro con suavidad, aunque en realidad quisiera romperlo.

Bella se giró y se quedó un momento pasmada y embelesada mirando a la chica frente a ella, quien tenía un magnetismo que te atraía. Te incitaba a acercarte a ella.

Todo depredador debía ser llamativo.

- ¿Sí? ¿Te conozco?- Le preguntó con brusquedad Bella.

Zenda la miro con burla.

- No, pero yo te diré solo una cosa, aléjate de Jacob, o te romperé hasta el hueso más pequeño que tengas en tu cuerpo, cariño. - Le hablo en un tono bajo y amenazante a la pálida humana-. Sé que tú no lo quieres, Isabella. Así que aléjate, porque sé que él no puede. Hazlo tú y no juegues con sus sentimientos, deja de lastimarlo.

Primero se sorprendió, pero luego se enojó.

¿Quién rayos era ella, para decirle con quién podía o no jugar?- Pensó Bella.

Por suerte, la loba frente a ella no podía leer mentes, sino, estaría en el suelo. Con la nariz rota...como mínimo.

- ¿Y tú quién demonios te crees para decirme aquello?¿Acaso eres su novia?-. Exclamó molesta.

Zenda adoptó una mueca de suficiencia, levantando su mentón y cruzándose de brazos.

Soltó una risa sarcástica.

- Soy más que eso.- Le dijo burlona-. Créeme que si lo hago elegir, cosa que jamás haría, me escogería a mí. Por que, ¿Tú quién eres? Nadie. No eres nadie a comparación de mí en la vida de él. Solo eres una idiota que se cree mucho por haber estado con un chico bonito.

》 Pero, ¿Qué pasó? ¿Acaso te cambiaron?-. Comentó con algo de cinismo-. No lo culpo, yo ni siquiera te hubiese soportado una semana. Eres una persona mala. Pero adivina qué, linda...yo soy peor. Así que mantén tu distancia, o te mandaré al otro lado del continente de una patada en el trasero-. Terminó por decir, acercándose amenazadoramente al cuerpo menudo de Bella.

Los Cullen oían impresionados el discurso- más bien amenaza- que le dió. En verdad intimidaba, el corazón de Bella latía a una velocidad impresionante.

Jasper pudo distinguir el enojo y el miedo en mayor parte dentro de la humana.

- ¡Zenda! ¿¡Qué haces?!-. Oyó la voz de su hermano, y se separó de la humana.

Camino con su característico caminar, meneando sus caderas en una danza peligrosa, provocativa, seductora.

Llegó hasta Jacob y lo miró seriamente.

- No hago nada, Jaky-. Su rostro estaba neutro, pero esa chispa de diversión que permanecía en su mirada la delató.

Jacob suspiró pesadamente.

- Te dije que no le hicieras nada a Bells, Zeze-. Habló molesto el Black.

Ella rodó los ojos.