AMOR

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Thomas POV

Dejé a Emma  en su casa justo después de medianoche y ahora mismo me dirigía a la mía. Sabía que no le había hecho gracia que cortara nuestra noche tan pronto, pero realmente quería tener tanto tiempo a solas con ella mañana como fuera posible y llevarla antes a casa hacía eso posible. Esperaba que una vez que se diera cuenta de por qué lo había hecho, apreciaría mi gesto. Mientras recordaba las últimas horas, mi teléfono empezó a sonar.

"¿Sí?"

"Toms, ¿cuál es el plan para mañana por la mañana?" preguntó Chris.

"Bueno, voy a recoger a Emma  antes de las 5:00." Chris le repitió a Alex  la hora a la que iba a recogerla, y empezó a quejarse.

"A Alex  no le entusiasma la idea de levantarse tan temprano." Chris se rió.

"Nunca he dicho que tuviera que levantarse tan temprano, esa es la hora a la que yo voy recoger a Emma. Ustedes pueden hacer lo que quieran." Alex le quitó el teléfono a Jasper.

"Oh, no, no voy a meterme en problemas con Vanessa  por tener una cita más corta que la de ustedes,estaremos allí. Nos veremos a las 4:40." Dijo Alex antes de colgar. Él tenía razón, probablemente tendría problemas si yo recogía a Emma temprano y ellos aparecían horas más tarde.

Cuando volví a mi apartamento, comprobé todo una vez más para asegurarme de que tenía todo listo para el desayuno mañana. Saqué el tostador y lo dejé en la encimera al lado del pan. Abrí el frigorífico y vi huevos, salchichas, bacon, fruta y naranjas. Como no estaba seguro de lo que a Emma  le gustaría, me aseguré de que tenía un poco de todo.

Miré el reloj y vi que eran las 12:30.

Quería dormir un poco antes de recogerla por la mañana así que apagué las luces de la cocina y del salón y me dirigí por el oscuro pasillo hacia mi habitación. Encendí la lámpara que había al lado de mi cama y caí sobre el suave colchón.

Miré el reloj otra vez, 12:37.

Van a ser unas horas muy largas. Pensé para mí mismo.

Me pregunto qué está haciendo Emma ahora mismo. Entonces recordé que le había pedido que se duchara antes de acostarse. Un millón de pensamientos empezaron a recorrerme la mente, ¿estaba duchándose ahora, o ya estaba dormida?, ¿se ha duchado como le he sugerido?, ¿qué tendría puesto?, el brillo de su piel cuando salía de la ducha... y otros muchos más, cada uno más picante que el anterior. Es imposible que duerma en esta condición. Pensé. Así que me levanté y me dirigí al cuarto de baño.

Abrí el grifo de la ducha al máximo, y por mi cordura mental, la puse tan fría como era posible soportarla.

¿En qué demonios estábamos pensando al hacer esta apuesta? Me pregunté mientras me quitaba la camiseta y la tiraba al suelo.

No mucho más, Thomas, puedes hacerlo hombre. Le aseguré a mi reflejo en el espejo. Es importante para ella, sólo espera. Ella lo vale, sin lugar a dudas lo vale.

Mis pensamientos volvieron al bar, la visión de Emma tumbada en la barra, sonrojándose furiosamente y lo increíblemente preciosa que estaba. Y como sabía su piel, y sus labios, eran tan suaves y cálidos. ¡Métete en la ducha! Me dije mientras me quitaba el resto de la ropa y me metía bajo el agua helada. El agua me cayó por la espalda y el pecho como ríos de hielo, limpiando todos los pensamientos de Emma de mi mente, y en vez de eso me concentré en ducharme y salir de ahí lo más rápido posible antes de que sufriera una hipotermia.

Después de mi ducha, estaba, desafortunadamente, totalmente despierto. Eran más de las 2 de la mañana y ya no valía la pena acostarse, por lo que empecé a preparar el apartamento. Hice la cama, coloqué la gran pila de cojines contra la cabecera, después limpié el cuarto de baño y el resto de mi habitación, queriendo darle una buena impresión a Bella. Me senté en el suelo delante de mi equipo de música y busqué entre mis CDs, poniendo algunos que a ella podrían gustarle. Elegí una gran variedad de música, esperando que algo le gustara.

Boicots y Moscas de BarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora