Sin nada

6 2 0
                                    

Emma POV

Salí disparada de mi habitación, con la cara todavía roja por Thomas. Llamé casualmente a la puerta de Carlie, que abrió una rendija, lo suficiente para sacar la ropa de Chris. Todo lo que vi, fue su brazo pálido y desnudo mientras me lasdaba.

"Gracias, Emma," escuché que decía la voz amortiguada de Carlie mientras cerraba la puerta rápidamente.

Raro... Pensé.

Tiré la pila de ropa en la secadora y la encendí mientras me escondía en el lavadero, esperando no ser detectaba por mi madre y sus chiflados invitados.

Vi como el temporizador hacía la cuenta atrás hasta cero y antes de que pitase, traicionando mi posición, abrí la puerta y saqué la cálida pila de ropa, estirándolas encima de la secadora.

Fácilmente separé las camisetas y los pantalones, pero entonces me encontré con un dilema, quién llevaba boxers y quien llevaba slips. Estaba de pie en la lavandería, sujetando las prendas de la misma talla, intentado imaginarme el trasero de quien iba en cuál.

Chris me pareció que era un chico de boxers así que eso es todo lo que se me ocurrió, pero pensé en preguntar antes de darle la ropa a Carlie, si es que esta vez sacaba más de la mano por la puerta.

Carlie sí que abrió la puerta y cogió la ropa de Chris de mis brazos. Chris confirmó que los boxers eran suyos cuando asomó la cabeza por la puerta del cuarto de baño. Salí de la habitación rápidamente antes de que viera más de Chris de lo que tenía intención.

Llamé suavemente a mi puerta antes de entrar. Cuando miré la habitación, Thomas no estaba en ninguna parte. ¿A dónde demonios podría haberse ido sin ropa?

"¿Thomas?" le llamé.

La puerta del cuarto de baño se abrió para revelar a Thomas, con mi albornoz celeste de diminutos patitos de goma.

"Estás muy varonil, Thomas..." Me reí mientras sacaba mi móvil y le hacía una foto vestido así.

"JA JA. Si quieres ver algo varonil, yo te enseñaré algo varonil..." me amenazó mientras empezaba a desabrocharse el cinturón del albornoz.

Mi parte diabólica quería desafiarle a que se quitara el albornoz y me enseñara lo que tenía, pero mi parte sensata dijo

Si hace eso, todo se habrá acabado Emma, el punto de no retorno estará sobre nosotras.

Se me puso la cara roja a la idea de ser deslumbrada por el perfecto espécimen de hombre que tenía delante. Con mi corazón latiendo fuertemente y antes de que queriendo o sin querer pudiera quitarse lo que llevaba, le puse la ropa en las manos, esperando que no viera cuánto me temblaban las manos.

Se lo di todo excepto su ropa interior. "Aquí tienes. De alguna manera supe que tú eras el que llevaba slips," bromeé mientras su ropa interior me colgaba del dedo.

Me la quitó de la mano y cerró la puerta del cuarto de baño con un pequeño golpe mientras fingía estar molesto conmigo. Thomas salió del cuarto baño limpio, vestido y con olor a jabón. Estaba tumbada en la cama cuando salón, y me encontré sonriendo por lo que veía.

"Te arreglas muy bien, Sr. Masen," me reí.

"Gracias Señorita Tompson, me alegra oír que lo apruebas. Me voy abajo para coquetear con tu madre y tu tía un rato. Te veré allí. Oh, antes de que se me olvide," dijo, girándose mientras abría la puerta. "Te he dejado un regalito en el baño." Y con un guiño y una sonrisa, se había ido.

Me bajé de la cama y fui al cuarto de baño con mi pila de ropa limpia. Sobre el mostrador, estaban los calzoncillos de Thomas.

Maldito sea ese hombre, y su trasero desnudito... Me reí mientras abría el grifo de la ducha.

Boicots y Moscas de BarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora