3. Confusion

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No paraban.

Prácticamente, cada dos días tenían un acto al que asistir o una entrevista que dar para promocionar su álbum o un videoclip. Todo era una locura, aunque era lo menos que podían dar por cumplir sus sueños. O eso era lo que ellos pensaban.
Además, se sumaba el hecho de que acababan de mudarse a un lugar un poco más espacioso.

-¡Buenos días! -Saludó Jimin aún restregando sus ojos por el sueño.

-¡Buenos días! -Le respondieron todos desordenadamente.

Parecía que esa mañana era el último en despertar, ya que todos los demás estaban sentados alrededor de la mesa del nuevo salón, así que, tomó asiento junto a Suga y se sirvió un poco de "bibimbap" que había preparado Jin.

-¿Anoche no llegaste un poco tarde? -Le cuestionó este, un poco preocupado observando las extremadas ojeras que traía en su rostro.

-¡Oh! Sí. -Se rascó disimuladamente el cuello. -Me entretuve ensayando y cuando me di cuenta era demasiado tarde.

No era la primera vez que le pasaba y sabía que sus hyungs se preocupaban por él pero realmente necesitaba ensayar. Le hacía bien y sentía cómo mejoraba a cada paso que daba. Aunque a veces su cuerpo llegaba casi al límite, sabía cuándo debía parar.

-Jimin, has perdido peso desde que comenzamos y ensayas mucho más que los demás. -Namjoon le reprendió con un tono demasiado suave como para ser demandante.

-Siento que debo mejorar para estar a vuestra altura, hyung.

El líder de la banda negó la cabeza tras ser la enésima vez que mantenían esa conversación.

-Solo ten cuidado. -Pidió con preocupación y Jimin asintió en silencio mientras vaciaba su plato para contentar a sus mayores y llenar su estómago.

Esa mañana, la entrevista fue rápida y bastante entretenida, por lo que, llegó la hora de la comida mucho antes de que ninguno se diera cuenta, dejándoles así toda la tarde libre.

Tras comer la deliciosa comida que Jin había preparado para todos, casi como hacía todos los días, cada uno se había disperso por su tiempo libre. Namjoon y Jin habían salido a comprar algunas cosas para la casa mientras que Suga se había encerrado en el cuarto, ya que le había venido la inspiración para escribir alguna letra que no les dejaría ver hasta que estuviese terminada.
Jungkook estaba en la sala jugando a algún videojuego al que consiguió enganchar a J-Hope y ahora jugaban juntos.
A Taehyung le tocó limpiar todos los platos pero Jimin decidió ayudar a su mejor amigo, por lo que, ambos estaban en la cocina colocando los platos en su lugar, completamente en silencio. Eso era extraño por parte de ambos pero Jimin era quién no continuaba las conversaciones como normalmente.

En realidad, no era que no quisiera, solo que su mente se encontraba en otro lado, dándole vueltas a todo lo que se agolpaba en su mente.

-¿Qué es lo más complicado?

-Que Jungkook acepte mi corazón.

-Entonces, tendrá que esperar toda la eternidad.

Las palabras se repetían en su cabeza. Sabía que había sido una broma inocente pero se clavaban como espinas y no le dejaban pensar con claridad.

Al terminar, salieron de la cocina y Taehyung se quedó en la sala observando a sus compañeros jugar mientras que, Jimin escogió salir a la terraza y disfrutar de la luz del sol que se dejaba ver a través de algunas nubes blancas. Se sentó en una silla con los piernas cruzadas sobre esta y echó la cabeza hacia atrás con los ojos cerrados mientras el sol golpeaba su rostro. No había demasiado silencio, puesto que en la calle la multitud de personas caminando y los coches hacían que se escuchara cierto bullicio pero él casi que lo ignoraba.

Beyond ~Jikookmin~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora