Epílogo I

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El timbre de su casa sonó sin previo aviso.

Acababa de llegar a Busan unas horas atrás para pasar el fin de semana junto a sus padres, ya que ese año no iba a poder celebrar su cumpleaños con ellos, así que, habían adelantado la pequeña celebración para poder verse, aprovechando que, esos tres días, el grupo los tenía libres.

Tanto Namjoon como Yoongi habían viajado a sus ciudades natales para visitar a sus familiares y Jungkook había llegado a Busan junto a él, quedando Taehyung, Jin y Hoseok solos en Seúl en esas pequeñas vacaciones que tenían.

-¡Jiminnie, abre la puerta!

Se acercaba la hora de la cena y era extraño que alguien llamase a esas horas, pero, ante la petición de su madre, Jimin caminó hasta la entrada para cumplir lo que le había pedido.

Una vez abrió, la sorpresa se vislumbró en sus ojos.

-¿Señor, señora Jeon? -Dijo aún con estupor, viendo que habían dos personas más pero su mirada se desvió solo a una. -¿Jungkookie? -Sus ojos seguían bien abiertos observando a las personas frente a su puerta, a las cuales aún no había ofrecido entrar, mientras el menor se encogía de hombros y sonreía algo avergonzado.

-Hola a ti también, Jimin. -Saludó con sarcasmo el mayor de los Jeon al ver que había sido el único ignorado.

En ese momento Jimin volvió a la realidad y le dirigió una mirada avergonzada al chico, el cual se reía por lo sucedido.

-Lo siento mucho, Junghyun, solo no esperaba verlos aquí. No me dijeron nada.

-Jimin, no les dejes ahí y hazlos pasar. -Le regañó su madre llegando junto a él y haciendo una reverencia de disculpa hacia sus invitados mientras el rubio se apartó de la puerta y, con una señal de su brazo, les invitó a pasar mientras se inclinaba en una reverencia cordial. -Gracias por venir. -Dijo la señora Park con una gran sonrisa aceptando la botella de licor que le ofrecían.

-Gracias por la invitación. Hace un tiempo que no nos vemos. -Comentó la madre de Jungkook siguiendo a la anfitriona hasta la sala principal.

Los dos "amigos" se quedaron atrás, esperando a estar solos para hablar con algo más de intimidad.

-¿Tú sabías algo de esto? -El rubio le cuestionaba con una ceja alzada y la mano aún en el pomo de la puerta principal.

-No. Simplemente me han dicho que íbamos a cenar con unos amigos y no me han dado más detalles.

Jimin frunció el ceño y sus labios a la vez, en una mueca adorable mientras le daba vueltas a algo en su cabeza.

-Algo me huele raro aquí. -Dijo tras unos segundos de silencio y Jungkook solo pudo volver a encogerse de hombros sin comprender por qué estaban ahí.

Que él supiera sus padres se llevaban bien de las veces que habían coincidido en sus conciertos o en el aeropuerto para recogerles pero nunca habían tenido una amistad fuera de eso, de ahí que no entendieran por qué ahora, de repente, estaban todos juntos en la casa del rubio.

Jimin suspiró observándolo e imitó su acción de encogerse de hombros para dedicarle después una sonrisa y acercarse a él, no sin antes cerciorarse de que nadie asomaba su cabeza por alrededor, y depositar un efímero beso sobre la comisura de sus labios, separándose casi al instante con una gran sonrisa vergonzosa en sus labios y encaminándose hacia donde los invitados estaban hablando con sus padres, con Jungkook tras él.

Justo cuando ellos aparecieron, Jihyun salió también de su cuarto encontrándose a todos en el salón sin comprender desde cuándo tenían invitados pero, en cuanto vio a Jungkook sonrió y se acercó a saludar.

Beyond ~Jikookmin~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora