- Em… - Luke lo ignoró y se adelantó a coger a David, de una manera bruta, que a Ashton le hizo erizar la piel. – Ven David, ven con papi.
- ¿Qué haces? –rió Ashton. – así no se coge a un crio.
- Joder Ashton. – suspiró Luke. – yo no sé cómo hacer esto.
- Primero empieza a contarme lo que pasó. – dijo él, cogiendo a David de los brazos de Luke
- Bueno… - susurró Luke. Ashton nunca lo había visto pasar vergüenza. Esta era la primera vez que Luke, un militar, un agente, de pies a cabeza, se ruborizaba. Sus ojos cobalto brillaron. – Ermh… Serilda fue un rollo, de esos de una noche, y bueno… digamos que… bebí de más… no hubo ni condón ni nada… y dentro de dos años… me entero… de que tengo un hijo. – abrió los brazos, alzó las cejas. – Flipante ¿no? – espetó – tengo un hijo ya de cuatro años.- Pero fue culpa tuya.
- Lo sé, pero existe el aborto.
- Eso no es una buena opción, y lo sabes. – miró a David. – deberías estar orgulloso de tener un hijo. – dijo Ashton serio, recordando a su Naiara.
- Y lo estoy. Pero no debería de haberlo tenido de esta manera. – suspiró él. – bendita sea la noche en que se me pasó por la mente follarme a Serilda.
Ashton se encogió de hombros.
- Ahora tienes un compromiso, espero que relajes un poco tu vida privada y sexual. – miró de nuevo a David, que jugaba con uno de sus cabellos. Ashton sonrió al ver que se divertía con su pelo. Eso también lo solía hacer Nai. – un compromiso muy grande.
Luke se sentó en una de las butacas del despacho de Ashton.
- Ashton. – él miró a su amigo. – te debo pedir un favor de vida o muerte.
- ¿Sí? – dijo Ashton arqueando una ceja.
- Enséñame a ser padre.