Weon Hinata weon

𝐄𝐥 𝐜𝐚𝐫𝐫𝐞𝐭𝐞 [𝐏𝟏]

 Narra Nishinoya

Llegamos a la casa de Daichi, estaba llena de gente, había música a todo chancho y olor a alcohol, cigarro, mota y ala, huele a buen carrete. Entramos y caminamos hasta el patio, allí vimos a algunos de los cabros del equipo así que nos acercamos a saludar.

—Buena Noya—. Asahi me saludó abrazándome con un brazo, en su otra mano sostenía un vaso. 

—¿Que estai tomándo?—. Pregunté curioso, el Azumane nunca toma.

—Jugo de manzana, ¿quieres?—. Me ofreció con una dulce sonrisa, yo negué con la cabeza y saqué de mi mochila a la vieja confiable.

—Baltica tomaba el otro ordinario—. Daichi se rió de mi chelita. —No la juzgues oye, si no es pa ti la wea—. La defendí.

—Tanaka, trajimos el jugo de naranja que pediste, está en la mesa—. Suga le indicó y el peladito salió corriendo a buscarlo.

—¿Trajimos?—. Pregunté de puro sapo. 

—Vine con la Rayi.

Se me paró todo menos el pico, si la T/N está acá significa que tengo que encontrarla y hacer algo antes de que alguien más me la gane, con lo rica que está ya todos la deben haber identificado.

—¡Chico refrescante!—. Oikawa se acercó a nosotros con los brazos abiertos, caminó y abrazó a Sugawara para luego desordenar su pelo.

—¿Cómo están los del Desayuno?—. Nos sonrió amigable.

—Karasuno—. Corrigió Daichi con una sonrisa. —Ustedes no dicen Ahora José, no wei—. Se defendió el otro capitán.

—Buen carrete te mandaste Daichi—. Iwaizumi, quién venía con Oikawa habló. —Gracias Hajime— El capitán agradecio.

—Hay buenas minitas—. Oikawa levantó la cabeza mirando a la gente, con que no me mire a la T/N está todo bien.

Narra Sugawara

—Hay buenas minitas—. Dijo Oikawa mirando sin soltar su abrazo.

 —Y minitos—. Me susurró al oído, hoy se come.

—Voy a ir a buscar a la T/N, Suga ¿Sabes donde está?—. Yuu me preguntó. 

—Creo que está con la Yachi y la Kiyoko bailando allá adentro—. Comenté, no estaba seguro de donde estaba, pero me dijo que hoy quería perrear hasta abajo con las otras managers.

—Voy a ir a buscar algo para tomar, ¿me acompañas?—. Toru me pidió y yo asentí, desde que jugamos en contra que he tenido una relación de leve rivalidad con Oikawa ya que el juega en la misma posición que yo.

Caminamos hasta la mesa donde estaban las bebidas, yo me serví vodka con jugo de naranja.

—¿Me sirves?—. Pidió pasándome su vaso. —¿Vodka con jugo?—. Pregunté.

—Vodka solo, sírveme poco.

Le serví y a penas terminé el castaño se lo tomó al seco. —Necesito un mínimo de alcohol antes de ver a Kageyama—. Se rió.

—No es tan terrible, Oikawa, el pobre era un pendejo cuando jugaba contigo.

—Lo sé, pero aún así.