quince

362 55 6
                                    


- Profesora Yoon, ¿Me permite a BimYoon? - suspiré cansada y apresuré por guardar mis pertenencias en mi mochila para después, de que la profesora Yoon asintiera con la cabeza, levantarme de mi asiento y salir con la mirada de todos en mí.

La prefecta me sonreía amigable mientras me esperaba en la entrada para después salir ambas y comenzar rumbo al salón de música.

- ¿Cómo va tu día, Han? - preguntó con una sonrisa y sus manos prosicionadas detrás de su espalda.

- Bien. Un poco estresada por las tareas de química y todo eso... - expliqué no tan feliz de recordar todo lo que tenía pendiente.

Pareció comprender y cuando estábamos a nada de entrar al aula, la puerta se abrió por sí "sola" dejando ver a JungHwan quien justo abría la puerta para salir.

- BimYoon Noona, le deseo suerte - sonrió y sus mejillas regordetas se tornaron un poco rosaditas haciéndome querer apretarlas.

- Gracias, JungHwan-ssi.

- Adelante, Han - la profesora Choi de canto me hacía una seña para entrar y tomar asiento a lado de JiSu, la chica de casi último año de universidad. De la facultad de arquitectura.

Mi banco se movía al igual que el de JiSu, porque probablemente eran nuevos.

Me sonrió y le correspondí.

Las partituras de la profesora Choi escritas en hojas blancas estaban siendo ordenadas por la de pelo rubio, dejándonos ver cómo es que todo lo podía hacer tan bien.
El sonido de las tizonas moviendose conforme a las manos de la profesora Choi, me daba un escalofrío de relajación en medio de todo el silencio.

JiSu no podía dejar de moverse en su banco con lentitud, haciendo que quisiera hacerlo también.

La Choi mayor dejó la tizona en el podium y sonrió cuando ya estaban en orden.

- Bien, chicas - de su enorme maleta sacó un par de hojas en un folder y lo abrió para después darnos una a cada quién. - Ya saben, desde el principio y sin pausa.

A JiSu le fascinaba Ariana Grande, y esta canción seguro la hacía volar, pues, ella se robaría el show cantando todas las partes.
Yo simplemente haría los altos y melismas que ella no pudiera hacer y era todo. No hacía mucho pero de vez en cuando me sentía cansada de simplemente hacer eso, no podía imaginarme en el lugar de JiSu.

- BimYoon, vas fuera de tono. JiSu, regresa hasta you - pidió la rubia sin dejar de observarme sin expresión alguna en su pálido rostro.

Así lo hizo JiSu, regresó hasta el casi último You de la canción, con su melodiosa voz lo hacía todo y cuando era mi parte, sentía que ya no podía hacer más.

- Otra vez.

Y ahí seguíamos, una y otra vez sin parar.

Perdóname, JiSu.

El melisma llegaba, mi última nota alta había salido bien, por lo que suspiré profundo para después hacer con claridad el melisma en yeah casi al final de la canción y después de de éste, unos altos nuevamente.

- Bien. Una vez más, ahora sólo tú, JiSu - pidió Choi con una sonrisa mientras aplastaba y desaplastaba el botón de su lapicero negro.

La de dos coletas asintió de igual manera y comenzó a cantar sin problema alguno.

En mi cabeza sólo estaba DoYoung. ¿Qué estará haciendo ahora? Claro que no pesando en mí, pero, en verdad tenía curiosidad apesar de que me haya sentir bastante mal.

Ese día, después de haber llegado a mi casa hecha una bolita de masa llorona y con piernitas, mi madre compró algunas paletas heladas para comer mientras yo le contaba todo lo que había hecho. Con lujos y detalle de todos y cada uno de los mínimos movimientos.

- ¿Y tú crees que en verdad no le gustas? BimYoon, los hombres son así, no se dan cuenta. - animó mi madre mientras tacaba su cabeza cansada de verme llorar.

- Me lo dijo de una forma tan cruel, mamá, ¿Cómo quieres que me lo tome? Supo exactamente qué decir, y no fue muy bueno con eso.

- BimYoon, BimYoon, ¡BimYoon! ¿Qué haré contigo? - suspiró mientras recostaba su cabeza en el mueble en dónde estábamos sentadas. - ¿Quieres apostar, entonces? - apostar con mi madre no era bueno, siempre ganaba, pero accedí simplemente porque sabía que yo tenía la razón esta vez.

Subí mi pierna al sofá y al instante lo primero que mi mamá dijo fue;

- Al menos traes calcetines - soltando un sereno suspiro.

₩ 5600 a que DoYoung en verdad me quería y la misma cantidad si era lo contrario.

Repito, sólo accedí porque sé que él me dejó muy en claro que yo no le gusto y porque con ese dinero podré comprar un corazoncito nuevo. O ropa, lo que venga primero.

- Ahora sólo tú, BimYoon - la profesora Choi me sonrió esperando a que comenzara.

Según yo, esa pequeña parte que me tocaba sonaba dolida así que podría interpretarla bien.

Los ojos de la profesora Choi acompañados de los de JiSu se abrieron por completo al escucharme, por lo que por dentro moría de vergüenza.

- Wahh~ - soltó JiSu cubriendo su boca sorprendida.

Entre mi canto la puerta del salón se abrió de a poco y cuando terminé, la cabeza de HyunSuk se asomó por el orificio que había abierto momentos atrás.
Su expresión era de sorpresa, y yo no pude evitar sonrojarme.

- Dígame, señor Choi - habló la profesora con el mismo apellido compartido con JiSu y HyunSuk y algunos alumnos más mientras que con su mano izquierda me señalaba que la esperara unos segundos.

- Profesora, el profesor Min pide que JiSu vaya con urgencia, ¿Podría ir? - las miradas que ambos se dedicaban me hacían levantar mis sospechas.

- Oh, por supuesto, corre, JiSu, no te tardes, debe ser necesario - la nombrada dejó la hoja en el podium de la profesora rubia e hizo una reverencia para después dedicarme una sonrisa y salir del aula con rapidez.

Así que JiSu y HyunSuk salían... Me lo veía venir.

- Hablemos de ti, BimYoon... - sonrió - Wow - ahora rió mientras me contagiaba de igual forma la risa. - Digo, ya hemos estado practicando bastante desde el año pasado pero sólo repites la canción. ¿Has tomado algún tipo de clases para este maravilloso talento?

- No, desde muy chica me gusta cantar... Aprendí sola.

- Increíble, y dime, ¿No te gustaría ir a algún programa de supervivencia para debutar en alguna empresa de idols? - su pregunta había sido bastante recurrente cada año de mi vida.

No, no quería, quería terminar mis estudios y después, si tenía tiempo, hacer mi audición kpop. Pero no, por ahora no. Es decir, es el sueño de todos -al menos la mayoría de chicas- pero, ¿Y si no me aceptaban? ¿Qué sería de mi vida después de tantos años de sólo práctica de canto y baile? ¿Y si me aceptan pero después me dicen que no podré debutar? Mucho tiempo que me pude haber dedicado a mis estudios echado a la basura. No me arriesgaría a eso.

- No, en realidad no quisiera. Quiero terminar mis estudios y después veo qué puedo hacer - sonreí - mientras tanto, cantar para todos cada año, es mi pasatiempo - volví a sonreír.

Me miró empática y sonrió.

- Puedes irte si quieres. Pero te recuerdo que debes seguir practicando, también vé invitando a tus familiares, ¡nadie puede faltar!

¡Vaya! ¡Después de cuatro largas horas!

A Cupido Solo Le Queda Una Flecha ⋆ K. DoYoung [ treasure ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora