In another life **ZUTARA**

Capítulo 7: General Daken

"Es evidente que la estrategia no impide la táctica"

-Leon Trotsky

Iroh era una de la pocas personas que lo había apoyado durante toda su vida, pero ese afecto que le tenía jamás lo detuvo para actuar con firmeza durante sus entrenamientos y no había método mejor que el de su tío, después de todo era el hermano mayor de su padre, ex-príncipe de la Nación del Fuego y la persona que mato al último dragón en la historia, no negaba que fuera duro pero si no lo fuese no sería capaz de mantener una batalla con Azula como lo hace hoy en día.

Agradecía todas las lecciones que su tío le había dado a lo largo de la vida y no solo en el campo de entrenamiento. Siempre resultaba refrescante usar sus espadas gemelas, y los tres guardias ya habían sido derrotados por él.

- Gracias por el entrenamiento - dijo Zuko enfundando sus espadas.

- A usted majestad por contemplarnos para ser sus rivales - respondió uno de los guardias que se veía realmente agotado.

- Se puede retirar - los guardas hicieron una reverencia y se retiraron.

- Excelente entrenamiento Zuko, sin embargo, sigues descuidando tu lado izquierdo, levemente, pero es una oportunidad para el enemigo.

- No ver del todo de ese lado es problemático, ¿Algo más? -preguntó con curiosidad.

- No querido sobrino, ya casi no tengo nada que enseñarte -sonriendo ampliamente. - Por favor únete a nosotros la señorita Tara nos ha traído chai y está muy sabroso. No hay nada mejor que un poco de té después de un duro entrenamiento, además de que, seguro que aún no has desayunado, nunca podrás entrenar con todas tus fuerzas si no comes apropiadamente.

- Vamos tío ni siquiera estoy cansado y falta mi sesión de fuego control, por cierto, ese par ya se demoró para iniciar -sentenció con leve molestia.

- Si van a llegar tarde los haremos sudar más pero mientras tanto ven a disfrutar de este delicioso desayuno y maravilloso té -mientras servía otra taza de té.

Zuko solo pudo suspirar y decidió subir con su tío, y sentarse a su lado, por otro lado, Katara les sirvió a ambos el desayuno y el té.

- Acaso no piensas sentarte Tara -Preguntó Iroh al ver a la joven aún de pie.

- No lo creo correcto General Iroh, soy una simple campesina y ustedes la realeza de mi Nación.

- Entonces te ordeno que te sientes y bebas té con nosotros - dijo Zuko sin cambiar su expresión.

Zuko podría haber sido criado como príncipe, pero en su exilio y cuando ayudó a su hermana a conquistar Ba- Sing-Se, aprendió que el mundo no es tan desigual como lo creía antes, además de que la joven era nieta de un hombre al cual respetaba mucho y por ello es que no iba a tratarla como una simple sirvienta, tampoco quería ser un niño mimado como otros nobles. Ante la orden impuesta Katara se sentó al lado de ambos hombres y el General le sirvió una taza de té con gusto.

- ¿Tú lo preparaste querida? -preguntó el viejo maestro fuego a lo que Katara solo asintió. - Está muy rico, pero le falta un toque aromático, pero me encargare de afinar esos puntos contigo, una pupila tan diestra para hacer té no debe dejarse pasar.

- Ignora lo que dice mi tío este té está bien -comentó Zuko mientras lo bebía. - Pero no te prohibiré si quieres aprender de él.

- Será un honor aprender a hacer un té tan delicioso como el que hace el General -fue la única respuesta de la morena.