Las siguientes semanas fueron relativamente tranquilas para Hermione. Las clases de Pociones que compartía con Zabini eran casi agradables, el moreno le caía bien cuando no la molestaba hablándole de Malfoy. Era bastante listo, no cometía errores cuando se trataba de echar algún ingrediente al caldero o mover la poción de un lado a otro.
Volteó a ver a Ginny, ella le había contado que Malfoy estaba actuando bastante agradable. Los vio reír ante un comentario que había dicho él. Ginny se estaba riendo con Draco Malfoy y Hermione pensó que su amiga se estaba volviendo loca. La clase ya había terminado, solo hacía falta entregar los avances a Slughorn.
- Parece que nuestros amigos se llevan bien, Granger – la aludida volteó a ver a su compañero.
- Si no lo viera con mis propios ojos, no lo creería.
- Tú deberías de dejar de resistirte ante el encanto de Draco.
- ¿Cuál encanto? Porque por más que lo miro, me sigue pareciendo muy pálido y delgado.
- Entonces admites que lo volteas a ver.
- Zabini, ya deja de inventar cosas que no. Oye ¿tienes hermanos?
- No, ¿por qué?
- Yo tampoco, es solo que tengo una... amiga muggle, sí eso, una amiga mía. Sucede que su mejor amiga es novia de su hermano. Pero ella terminó con él y me estaba preguntando cómo se sentiría mi amiga ante el hecho de que su mejor amiga terminara con su hermano, es decir, ¿seguirá siendo amiga de su mejor amiga? ¿qué pasará con su hermano y con ella?
- Granger – le dijo Blaise en tono de duda – no entendí muy bien, pero creo que deberías de preguntarle a Ginevra o a Lovegood. Espera, mejor a Ginevra, creo que la lunática sólo te enredará más.
- Cierto. Solo que se me acaba de ocurrir y tú eres el que estaba aquí.
- Aunque si te puedo dar un consejo, creo que la amistad es algo independiente de cualquier relación. Si terminas con alguien es una cuestión de dos, tu amiga no debería perder a su amiga, aunque quizá la hermana de su novio debería de tomarse un tiempo para pensar las cosas para acostumbrarse a su hermana no saliendo con la novia de él... espera, creo que ya me enredé yo solo.
Hermione rio un poco. Zabini le estaba cayendo muy bien. Casi no se acordaba que él era de Slytherin y ella de Griffyndor. Quizá Ginny tenía razón y las serpientes no fueran tan malas. Un papel cayó sobre su escritorio, enfrente de ella. Lo desdobló ante la mirada de Zabini.
"Deja de tontear con Blaise y empieza a hacerlo conmigo"
Volteó al lugar de Malfoy, pero no lo vio allí, porque éste estaba justo enfrente de ella.
- Eres lenta, Granger.
- ¿Dónde está Ginny? – le preguntó ella ignorando su comentario, vio a su amiga cerca de Slughorn.
Draco hizo lo mismo e ignoró su pregunta, tenía sus manos dentro de la túnica. Se acercó a su oído y le susurró con voz ronca.
- Espero puedas ir más rápido cuando estés sobre mí.
Hermione estaba completamente segura de que el color rojo de sus mejillas podía verse desde Hogsmeade. Fulminó con la mirada a Draco cuando éste adquirió nuevamente una distancia prudente de ella. El rubio no dijo nada más. Hermione volteó a todos lados, esperaba que nadie hubiera visto cómo se puso ante la cercanía de él.
Su mirada llegó a la de Blaise, éste apoyaba su cabeza en ambas manos y suspiraba exageradamente, le sonreía y hacía ojitos de una forma infantil. Abrió la boca para burlarse de ella, pero Hermione se le adelantó.
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Detrás del librero (Dramione +18)
FanfictionHermione, Ginny y Luna cursan su séptimo año después de la guerra en Hogwarts. Cuando Draco y Hermione se topan en un lugar en el que ninguno de los dos debería de estar, comienza un forcejeo dónde la Griffyndor da pelea, pero después de algunos ro...