Mi pecado 〔Eunhae〕ㅤ

Dulces despedidas.

¡Buenas, buenas! Finalmente traje el capítulo que les había prometido, planeaba publicarlo el día de San Valentín pero no tuve tiempo de absolutamente nada así que hasta hoy ya pude venir a publicarlo.

Espero les guste mucho.

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Era el día de la cena con Hyukjae, estaba nervioso ya que no sabía realmente de qué iba a la cena, no sabía quiénes irían o si había algún tipo de etiqueta para asistir. 

Hyukjae no respondía mis mensajes y parecía que su celular estaba apagado, también le había preguntado a Heechul si tenía planes para ese día respondiéndome que saldría con Hangeng por lo que entendí que Hyukjae no les había mencionado nada sobre la cena.

¿Eran personas cercanas a su familia a las que había invitado? ¿Solo me había invitado a mí? 

Solté un pesado suspiro y me lancé sobre la cama luego de tomar una ducha, intentando calmar la avalancha de pensamientos que estaba teniendo en esos momentos.

No era la primera vez que visitaría a Hyukjae o saldría con él, sin embargo, estaba más nervioso que nunca, ni siquiera sabía si iba a ser capaz de comer con el estómago revuelto.

Aún tenía dos horas para calmarme y arreglarme, no quería pensar en que sería la última vez que vería a Hyukjae ya que eso me ponía aún más nervioso. Todos los recuerdos entre nosotros dos comenzaron a hacerse presentes, me sentí muy nostálgico al pensar que las cosas entre nosotros dos no habían podido ser y que al final solo teníamos eso, recuerdos el uno con el otro. Deseaba tanto poder enamorarme de nuevo de la forma en la que lo hice con Hyukjae y que de la misma forma él no se cerrara al amor, ambos merecíamos ser felices después de todo a pesar de no estar juntos.

Ya casi tenía un año de haber llegado a Seúl, casi un año de haber cambiado de vida, conocer nuevos amigos, tener un empleo, incluso había ganado el segundo lugar en un concurso. Me habían sucedido muchas cosas malas, había pasado por mucho estrés y lloré más veces que en otros años pero a ese día en específico al fin me sentía en paz conmigo mismo, sentía que todo había llegado a su resolución y que el siguiente año podría ser uno de los mejores en mi vida.

Haber conocido a Hyukjae se dividía entre lo mejor y lo peor que me había sucedido ese año, quizá todo lo que sucedió entre nosotros fue una lección para ambos que necesitaríamos a futuro. A pesar de estar resignado a que no estaríamos juntos, una parte de mí aún creía que no todo estaba perdido, que de alguna forma u otra él decidiría quedarse en Seúl.

Pero siendo realistas esa no era una posibilidad.

Luego de un rato de repasar todo eso en mi cabeza decidí finalmente vestirme, repasé la ropa de mi armario una y otra vez sin saber qué usar, quería algo casual pero formal a la vez, algo que se viera relajado pero también que me hiciera ver presentable.

Finalmente me decidí por un pantalón negro, una camisa blanca de cuello, un suéter azul que iría sobre la camisa y unos mocasines negros que mi tía me  había regalado meses atrás y que nunca había usado.

Finalmente estaba listo para irme  a la casa de Hyukjae, tomé las llaves de mi auto y bajé por las escaleras. No había nadie en casa más que las personas de servicio, mi tía se había llevado a mi madre de paseo por todo el día, y en palabras de ella ''no regresarían temprano'' así mismo como mi primo también había salido.

Subí a mi auto aún con el estómago revuelto, me daba algo de terror conducir en ese estado ya que al estar nervioso no me podía concentrar bien. Luego de un rato de tanto pensarlo moví la cabeza en negación y me salí del auto, no era prudente que manejara mientras la cabeza me daba vueltas, no podía poner en peligro mi vida y la de los demás.